Yo sé que todos nos gusta identificarnos con Dicaprio, especialmente a los chilenos. Desconozco por qué, quizás por lo resilente que ha sido con su situación “premios de la academia“, pero le tenemos tanto cariño que hasta hay un grupo para celebrar en Plaza Italia si es que llegará a ganar un Oscar.
Bueno, para todos los Dicaprio Believers, tengo muy malas noticias, porque siendo honestos, la actuación de Dicapio en The Revenant no es del todo merecedora de un Oscar.
No quiero decir que Dicaprio es un mal actor, porque es increíble, pero comparando sus actuaciones en películas como “Atrápame si puedes” o hasta “El Lobo de Wallstreet” darle el Oscar este año a Dicaprio por The Revenant, es literalmente “un premio de consuelo”.
Eso si aclaro que la película del mexicano Iñárritu es hermosa por donde se le mire.
La fotografía ES simplemente para un Oscar y desde Birdman que Alejandro nos viene demostrando que es un atleta de alto rendimiento con la cámara a través de escenas y tecnicismos visuales que dejan excitados a cualquier estudiante de cine o fotografía.
Pero a pesar de todas las escenas y locaciones dignas para adornar Pinterests y Tumblrs de fotógrafos y amantes del outdoor, el guión no está a la altura. Ahora les explico por qué.
En las historias de venganza como, la de esta película, los giros argumentales son útiles y necesarios para mantenerte atrapado (Ej: Gangs of NY, Kill BIll, Hard Candy, Oldeuboi). Son giros que van modificando constantemente tu percepción de la moral y las motivaciones de los personajes, aunque lamentablemente no logras sentirte cómodo mirando los intentos desesperados de un tipo por vengarse en un contexto como el de The Revenant.
Cuando ha transcurrido poco más de una hora de película, a lo mucho, empiezas a cuestionarte si el protagonista sigue con su moral tan alta como al principio…y el problema es que la película sigue en todo minuto esa dirección. Lo único que te mantiene “tenso” es preguntarte cuando diablos dirá SUFICIENTE. Peor aún, el final es difícil de digerir o más bien dicho creer, pues cierra muy a lo hollywood.
Es por eso que el guión se siente estirado. La razón por la que no te sientes atrapado durante las dos horas y media que dura, es porque el único giro interesante es el del principio (El asesinato). Luego lo único que vemos es un derroche de talento en términos de actuación, efectos, montaje y dirección, que de seguro serán premiados, pero no pasará de la “mejor fotografía” porque al final del día, The Revenant NO es tan buena.
Volviendo a Dicaprio. Su odisea de venganza está repleta de tanto, tanto, tanto drama, que al final todo parece una broma, un personaje con mucha mala suerte que en casos como el mío, desearías que se muera pronto para que todo acabe, aunque en ese punto, lo único que te queda es el morbo y la tensión de ver algunas de las escenas fuertes, que en mi caso me recordaba el efecto de ver gags de Jackass; como cuando sabes que alguien se va caer pero aún así quieres verlo…y casi que reír.
La película en conclusión, es un ejemplo más de la receta de Iñarritu, que es crear una estética y narrativa visual que hace que todo parezca más profundo de lo que realmente es…
En fin. The Revenant es una gran película, pero por lejos, no es una película que beneficie particularmente las habilidades de Dicaprio y eso estoy seguro lo comprobaremos el día de los Oscar.
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