Tragedias y maravillas pasaron el 2007. Pero dentro de toda la adolescencia de algunos y los primeros años de la adultez de otros, este año nos dejó álbumes que nos tienen rayados hasta la actualidad desde hace exactamente 10 años.
En nuestros corazones el 2007 tiene un lugar muy especial, ya sea por las grandes farras que nos mandamos o eventos lamentables que ocurrieron. La saga de Harry Potter terminó de editarse y pudimos leer el desenlace de la historia del niño que vivió; Estados Unidos vivió una de las masacras más grandes de su historia, cuando un armado Cho Seung-Hui mató a 33 personas en Virginia Tech; salió el primer iPhone de la historia a la venta, y Britney Spears colapsó tanto nerviosamente que se peló y persiguió a los paparazzis con un paraguas. Como te dijimos: cosas buenas y malas. Dentro de lo positivo, el 2007 fue un gran año para la música y nos dejó joyitas de discos.
Aquí te recopilamos la crème de la crème, los mejores álbumes del año en que perdimos a Anna Nicole Smith.
Neon Bible – Arcade Fire
Elegido en múltiples listas de fin de año como uno, o el, de los mejores discos del año, el Neon Bible cementó la popularidad de Arcade Fire en el circuito del indie. La gran mayoría del álbum fue grabado dentro de una iglesia que la banda restauró en Quebec, Canadá, y que incluye temazos como “Black Mirror” y “No Cars Go”. Las grabaciones siguientes de Arcade Fire podrán sonar más innovadoras, pero el sonido casi orquestal que alcanzaron en Neon Bible no se nos va a olvidar nunca – Palo Valencia.
Cross – Justice
Creo que Cross es la razón por la que conocí a el 90% de los amigos que tengo hoy en día, ya que no importaba de dónde venías o hacia donde ibas, si en una fiesta prometían Justice, ese era el lugar donde debías estar. Puede que la música disco hoy en día esté de capa caída, pero Cross de Justice nunca dejará de sonar fresco y contemporáneo – Francisco Ávila.
Favourite Worst Nightmare – Arctic Monkeys
“505” puede ser, probablemente, una de las canciones que más me recuerdan a ese amor de colegio que terminó muy pronto. Arctic Monkeys me acompañó en la cúspide de mi adolescencia con un sonido mucho más maduro que en Whatever People Say I Am, That’s What I’m Not, un tremendo debut por donde se le mire. Mención especial a canciones como “Fluorescent Adolescent”, “Old Yellow Bricks” y “Brianstorm”, que me han hecho en carretes hasta la actualidad – P.V.
Riot! – Paramore
Después de All We Know is Falling, Paramore nos regaló un disco realmente sobresaliente de pop punk, repleto de potencia y una vibra que lo hacía perfecto hasta para bailar. “That’s What You Get” se convirtió en un clásico gracias a su aparición en la versión criolla del clásico de MTV NEXT Chile, mientras que “Crushcrushcrush” o “Misery Business” son esa clase de singles que cualquier playlist que intente devolvernos al 2007 DEBE incluir.
Good Girl Gone Bad – Rihanna
La Riri que conoces hoy empezó su evolución durante este álbum y todos pudimos testear por primera vez el poder que Rihanna tendría en nuestra vidas adictas al pop. Nadie pudo para de tarear “Umbrella” durante un año completo (o cambiarle la canción dentro de las discos en que la tocaban). “Rehab” se convirtió en un himno de las relaciones tóxicas, “Don’t Stop The Music” no paraba de sonar en la radio y te creías la muerte con “Shut Up And Drive” como ringtone de tu celular. Grandes tiempos.
Sound Of Silver – LCD Soundsystem
Cuando el disco homónimo de LCD Soundsystem nos parecía una pieza insuperable de dance punk, los neoyorkinos nos impactaron con un disco que parecía más bien hecho para llorar. Si nunca se te puso la piel de gallina con “All My Friends” es porque o no tienes amigos, o nunca escuchaste esa canción que define todo el álbum.
Graduation – Kanye West
El tercer disco del rapero de Chicago es otra muestra de la genialidad a la que puede aspirar y llegar. Inspirado principalmente en el movimiento house que se originó en su ciudad natal, Graduation también tiene influencias del reggae, dancehall y el synth-pop. “Can’t Tell Me Nothing” y “Flashing Lights” los son puntos altos del último álbum de Kanye West de la trilogía del Dropout Bear, una caricatura del propio artista sobre como dejó la universidad para convertirse en el artista que es hoy.
On Letting Go – Circa Survive
Anthony Green es un tipo que siempre ha sorprendido por sus capacidades vocales. Muy claro dejó su talento con el demo de Saosin y más tarde con Inuit Session y Juturna de Circa Survive. ¿Qué hay del resto de la banda? On Letting Go nos demostró que Circa Survive era mucho más que un frontman carismático gracias a sus riffs vibrantes, letras hermosas y bajos que tocan tu corazón. Si aún no lo has escuchado, te recomiendo ponerlo en loop, pero partiendo desde “Kicking Your Crosses Down”.
Myths Of The Near Future – Klaxons
Uno no puede hablar de new rave si es que nunca escuchaste el hypeadísimo disco de Klaxons, un álbum que al momento de su debut puso sobre la mesa referencias a todos los artistas de antaño que amábamos, aunque probablemente su mayor mérito es la construcción visual que lograban a través de sus letras. Y nunca olvidemos que Garnier prostituyó “Golden Skans” a penas salió, pero sigue siendo un excelente tema.
Kala – M.I.A.
“Paper Planes”. Nada nos recuerda a M.I.A. como los balazos y la máquina registradora sampleada en la que es, quizás, la canción más famosa de Matangi. El disco comenzó a ser grabado en 2006, en locaciones de países como India, Jamaica, Australia, Liberia y Trinidad. Diplo, Blastarr y Timbaland produjeron Kala, el álbum que puso en el mapa de todos definitivamente a la artista.
Mención Honrosa:
In Rainbows – Radiohead
souljaboytellem.com – Soulja Boy
Infinity On High – Fall Out Boy
Shock Value – Timbaland
Volta – Björk