En estricto rigor con Colin Frangicetto, el guitarrista de la banda (el de más a la izq. barba), que además es pintor.
La primera vez que vino Circa Survive a Chile fue hace tres años y fue una cita improbable en el Club Hípico, en el marco de una Expo Tattoo, o sea que la entrada, no recuerdo exactamente, pero costaba menos de 10 mil pesos. Increíble.
La tocata fue justo al atardecer (por Dios que rico cuando hacen los conciertos a esa hora) y los colores morados y rojos y azul del cielo con el sol y el smog hacían que todo fuera íntimo y hermoso. Los que estaban ahí así lo recordarán, los que no, dudo mucho que estén leyendo esto.
Anthony Green gritando con el micrófono pegado en la garganta, subiéndose encima de lxs que estábamos en las primeras filas, fue algo difícil de olvidar.
3 años después y de la misma forma improbable (no es una banda tan famosa), Circa Survive volvió a Chile. Esta vez para presentar su sexto disco “The Amulet”, además de un show acústico que dio su vocalista Anthony Green (que además de tener una carrera solista también es el cantante de Saosin, que viene a Chile en febrero del 2019).
A horas de lo que será el show en el Subterráneo – que abrirá Tenemos Explosivos- conversamos con uno de los guitarristas de la banda Colin Frangicetto, que además de músico es pintor y todo parece indicar que también es como el guía espiritual del grupo y el que se ha encargado de mantener a flote a Circa y en especial a Anthony Green, cuyos problemas con la adicción a las drogas los han tenido caminando por el borde varias veces en sus 14 años de carrera.
¿Además de músico eres pintor. Cómo describirías en términos de pintura el disco “The Amulet”?
Pienso que Esao Andrews, que es quien ha estado a cargo de todas nuestras portadas, hizo un gran trabajo en ese sentido. Pero si tuviera que describir el disco en mis propios términos visuales, diría que es algo más bien femenino, complejo, con formas orgánicas, naturales, no geométricas ni duras. Sería más como una flor que como una estructura.
Una característica de la música de Circa Survive es que tiene una forma de encontrar belleza y luz, en lugares medio oscuros, como la tristeza. Suena como melancolía o resiliencia. ¿Eso es algo que les sale natural, o lo hacen conscientemente?
Es definitivamente algo natural. Todo lo que esta banda hace, y es lo que me hace seguir amando y apreciando tanto lo que hacemos, es justamente que no forzamos las cosas. Así es como nuestro sonido nació, los cinco juntándonos y tocando lo que nos parecía que se sentía bien. Pero estoy de acuerdo, y creo que es una bonita forma de ponerlo, porque es una metáfora de como vemos la vida. Todos sentimos de formas diferentes por supuesto, pero la vida es básicamente belleza y tragedia. Va depender de cómo lo quieras ver cada día. Cualquier día, cualquier momento, puede ser muy triste y devastador, pero también puede ser increíblemente lindo, una experiencia de euforia.
¿Cómo crees que tu pintura y tu forma de hacer música dialoga?
Desde que me empecé a tomar en serio la pintura, me encontré constantemente tratando de separar ambas cosas. Hacerme el tiempo para pintar, luego hacerme el tiempo para hacer música. Son diferentes, pero hay algo que me tomó mucho tiempo entender y que ahora me parece muy natural, todos somos parte de un todo y si miras la vida desde la perspectiva del arte, las cosas simplemente fluyen. Puedes tomar un pincel y hacer una pintura o tomar la guitarra y tocar, o cocinar algo y se va sentir exactamente igual. Todo se trata de tomar una herramienta y expresar lo que estás sintiendo en el momento. Trato de ver las cosas de esa manera.
Te he escuchado hablar sobre las sincronías como una forma de salir de la depresión. ¿Me lo explicas?
En distintos periodos de mi vida he tenido episodios muy intensos de sincronías, asi como coincidencias muy significativas, y he notado que ese tipo de cosas han pasado cuando he estado sintiéndome extremadamente sobrepasado o deprimido, o en un estado mental no sano. Y cuando hago el switch y trato de darle una vuelta positiva a las cosas, empiezan a suceder otras y es casi como si el universo me estuviera diciendo “si, esa es la dirección que tienes que tomar”. No podría decirte que lo entiendo del todo pero, me he entregado a la idea de que hay algo más grande, una inteligencia, alguna gente le llama Dios, pero un extraño orden mágico. Esto me lleva a lo que hablábamos antes, de la belleza y la tragedia. Yo pienso que la depresión es sentirse sin esperanzas y sentir que nada tiene sentido, y lo que las sincronías intentan hacerte ver, es que uno puede elegir mirar la belleza, de qué cosas puedes hacer en cada momento en esa dirección. Eso aplica a algo más grande en el sentido de, cómo puedo hacer eso por otras personas, porque mientras más uno se encierra o se enfoca en uno, no quiero decir que la depresión sea una auto obsesión, pero mientras más me salgo de mi mismo y me abro al mundo y a los sentimientos de otras personas, puede estar siendo el peor día de la historia pero yo quedo libre de eso porque estoy viviendo en otra frecuencia. Las sincronías son como un recordatorio universal de eso.
¿Cuán en serio se toman este tipo de cosas, como la salud mental, en la banda, considerando lo dura que ha sido la pelea de Anthony (vocalista del grupo) con sus adicciones?
Muy en serio. Y cada día, cada año que pasa, me doy cuenta que lo que nos ha mantenido juntos ha sido solamente el amor entre nosotros y hacia otras personas. Por eso ponemos nuestro bienestar y nuestra felicidad por encima de todo. Una forma sencilla de decirlo es que para nosotros nuestra amistad está por encima del negocio de la banda.
¿Crees que la industria de la música toma estos temas en serio? Te lo pregunto por lo que hace poco pasó con las muertes de Kyle (We Came as Romans) o Chester, (Linkin Park) ¿Crees que la industria toma en serio el tema de la salud mental de sus artistas?
No creo que ninguna industria se tome el tema suficientemente en serio. Por definición una industria está preocupada del dinero. Tanto los sellos, como los canales de televisión, o las revistas incluso han tenido por demasiado tiempo una línea difusa respecto a su posición en este punto. Es cool ver una película buena, o un programa de tele bueno, o ver a la banda que amas en la portada de una revista, pero eso no quiere decir que ninguno de ellos se preocupe de los artistas. Lo que les preocupa, en mayor medida, es la plata. Es como que son una máquina que identifica que la gente conecta con el arte, y luego pone las dos cosas juntas para sacar un beneficio económico.
Pienso que hemos llegado a un punto de crisis, en donde seguir pretendiendo que estamos ok simplemente ya no funciona. Hacer incómodo o un tabú que la gente hable de sus sentimientos oscuros o sus problemas de adicción o lo que sea solo lleva a lo peor, así que necesitamos ser más abiertos respecto a eso. Abrazo la esperanza de que como sociedad podamos avanzar hacia preocuparnos más por los humanos que por la plata.
Ahora, en particular sobre la industria de la música no se realmente que será de eso, sobre todo porque la mayor parte de nuestra carrera hemos estado medio afuera. Somos parte pero jugamos con nuestras propias reglas, es decir, si nos presentan un proyecto de una gira donde la plata es increíble, pero encontramos que a nivel sicológico o mental, nos puede hacer daño, preferimos decir que no. Igual que si sabemos que en la misma gira va gente que tiene comportamientos peligrosos, que nos puedan meter en problemas, preferimos decir que no. Y por supuesto que eso a muchos sellos o compañías de managment no les gustaría nada y jamás querrían trabajar con una banda así, y está super bien, porque nosotros tampoco queremos trabajar con ellos.
A lo que voy es que llegado a este punto de nuestra carrera lo que mas nos interesa es mantenernos vivos, estar sanos, felices, hacer arte, conocer gente, hacer que gente se reúna. Eso ya nos hace sentir inmensamente agradecidos. Por supuesto que nos gusta que nos paguen por hacerlo para no tener que trabajar en cosas que no nos gusten, pero estoy seguro que si en algún momento esto comprometiera nuestra felicidad y nuestra amistad todos optaríamos por trabajar en otra cosa.