Desde su creación en la ciudad de Valparaíso en 2014, Proceso de Error ha buscado acercar a un amplio público diversas obras de video experimental de forma gratuita, y dar espacio a realizadores para la creación de piezas híbridas y de resistencia a la industria comercial.
“Proceso de Error sigue mirando de reojo las opulencias del cine de grandes industrias para asomar su cabeza y abrazar una propuesta de diálogo entre obras, de mancomunión, no la competencia feroz de las carreras propias del postcapitalismo. Y desde su centro expansivo como territorio de límites desdibujados, facilitar espacios de creación, comunicación, exhibición y proximidades entre obras, entre seres humanos que viven y sienten”, señala la curatoría del certamen.
Luego de una convocatoria a la que llegaron más 1.100 realizaciones de todo el mundo, desde países como Irán, Alemania, Italia, Estados Unidos, España, Eslovenia, Israel y México, se seleccionaron 27 obras. Durante la primera jornada del evento se liberarán 10 de ellas dentro de los programas Penumbras despiertas e Ilusiones indómitas, que antecederán el estreno exclusivo de Portales en llamas, un proyecto colaborativo que surgió a propósito de la revuelta del 18 de octubre y que invitó a autores a componer una obra crítica y reflexiva sobre la libertad, la represión, el constructo patriarcal y la expansión de fronteras.
“El estallido social reveló un malestar de décadas y reflexiones que ya nos veníamos haciendo acerca de los problemas en la salud pública, las revueltas territoriales en wallmapu/chile y los distintos temas que nos convoca cuestionar actualmente: la existencia, la corporalidad, el sentido de lo colectivo, la razón de estar presentes, de tener los sentidos bien abiertos. Este proyecto colectivo nace de la necesidad de vincularnos para no volver atrás”, señala Daniela Lillo, curadora y directora de Proceso de Error sobre la obra colectiva que se exhibirá en el espacio público, en distintos momentos del festival y lugares del mundo.
Como introducción a cada exhibición y muestras alternativas se liberará una cortina oficial, seleccionada tras una convocatoria. La artista ganadora es Fanny Leiva, quien realizó un interesante montaje de animación con la técnica de rotoscopia análoga, que consiste en imprimir los fotogramas de un video para luego intervenirlo, cuadro a cuadro, escanear y volver a componer, pero con la intervención incorporada.
“Tenemos la oportunidad de ver obras que mutan cada vez que las volvemos a ver, piezas que incluso cuando no las miramos siguen expandiéndose. Comprobamos así que el cine está vivo y su hibridez hace posible que volvamos a descubrir una y otra vez sus diversas esencias”, dice Lillo.
ARTISTAS INVITADOS
Sumado a la muestra internacional se desarrollarán conversatorios: un diálogo con las cineastas mexicanas Azucena Losana y Annalisa D. Quagliata, destacadas exponentes del video experimental, quienes trabajan con distintos formatos de celuloide, componiendo trabajos en súper 8 y 16 mm, generando memoria y resistencia cultural desde la factura artesanal y la autogestión.
En esa misma línea, habrá un encuentro virtual con el colectivo de investigación en formatos fílmicos CEIS8, un grupo de alquimia moderna que impulsa la creación en base a soportes análogos. Muestra de ello fue Fábrica de Horizontes: taller de cine sin cámara, que durante octubre convocó a 12 personas a intervenir una mica tamaño oficio con 10 segundos de metraje en 16 mm, utilizando las ventanas de cada participante como mesas de luz verticales.
El viernes 11 de diciembre a las 16 horas, Carlos Vásquez, director de [Pewen] Araucaria (2016) y co-director del documental Las Cruces (2018), a cargo del laboratorio creativo LAB Proceso de Error, intercambiará experiencias con el reconocido cineasta, guionista y artista plástico Tomás Welss. Durante esta versión del festival destacará una completa retrospectiva de su trabajo, incluyendo su último premiado cortometraje Magic Dream (2018).
En más de 30 años de carrera, la filmografía de Welss ofrece una visión crítica de la naturaleza humana, con humor negro y un orginal uso de color y gestualidad en 2D y stop motion, transformándose en el animador chileno de mayor renombre en el mundo.
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