Suele pasar en cualquier tipo de cosas que la primera entrega de una saga es la mejor, y después, empeora.
Watch Dogs Legion, la tercera en su orden, viene siendo precisamente el ejemplo de lo opuesto: después de probarlo es posible sostener que Ubisoft superó con creces los primeros dos juegos, los cuales no tuvieron la recepción esperada. Éste, ambientado en Londres, tiene todo para hacernos pensar que sí.
Historia
Uno de los aspectos más atractivos de juego entrega es la trama: como mencioné recién, saltamos de San Francisco a Londres, donde recién hubo un atentado al Parlamento por el cual se ha inculpado a DedSec, nuestro grupo de hackers antisistema.
En ese sentido, se trata de una red en la que existe un montón de personajes, con sus propias historias y su propia relevancia individual. De hecho, una de las opciones existentes es reclutar a posibles miembros a la legión (NPC), leyendo previamente por el ya conocido escáner los antecedentes personales de cualquier persona que veas en la calle.
Si eres de los que les gusta leer todo, te encontrarás con unos historiales bastante originales: desde youtubers hasta lo que se te ocurra, y a partir de eso puedes decidir si conviene invitarle o no (¿tiene contactos, conocimiento, herramientas?). A partir de ello, puedes investigarlos y así buscar la mejor forma de convencerle.
(Como dato random, uno de esos personajes es el mismísimo Rubius, pero se activa a través de un código).
Éste es uno de los tantos ejemplos de las curiosidades que posee el juego, más trabajado y con más detalles cómicos y curiosos, tipo GTA. A nadie ha dejado indiferente que es un Watch Dogs menos serio que su primera versión, que definitivamente le ha dado un aire fresco y lo ha dejado más entretenido y dinámico.
Adicionalmente, es un juego que hace un comentario político, o al menos un guiño al respecto, en torno al Brexit y la crisis británica, ya que está ambientado después del abandono del Reino Unido de la Unión Europea. Tras eso, el país ha avanzado mucho tecnológicamente, al típico punto de ser una amenaza para los empleos de la gente, tipo Detroit Become Human, pero más distópico.
Los poderes políticos se han debilitado ante el poder de corporaciones económicas que han llegado a controlar desde la seguridad pública hasta la vida cotidiana de sus habitantes.
Sin embargo, es un tema que no alcanza a abordar mucho y que ha dejado con ganas de más: ¿Qué ha pasado con Londres específicamente? ¿Por qué los malos son malos? Son algunos puntos que hicieron falta desarrollar.
En lo estético, le da un dulzor de acción especial el uso de máscaras y las misiones que te dejarán permanentemente enganchadx a la historia. No está demás decir que aparte, cae como anillo al dedo después de un 2020 en el que Anonymous anduvo bastante de moda en la contingencia internacional, o respecto a los encapuchados de las marchas que han tenido lugar en distintas partes del mundo.
Jugabilidad
En el mismo sentido de la red de personajes, en este juego no eres una persona en específico, sino toda DedSec: la intención es ir eligiendo al personaje más conveniente de acuerdo a cada misión (la misma lógica por la que vas reclutando también).
Por ejemplo, un obrero es una buena opción para infiltrarse en misiones que tengan que ver con construcciones y tal, un modo de juego que es bastante dinámico y divertido, incluso estratégico.
Y por supuesto se mantiene el mundo abierto: uno de los elementos más apreciados, lo cual deja una infinidad de posibilidades para realizar en la ciudad. Con esto me refiero a un montón de misiones secundarias posibles, incluso actividades recreativas como dominar un balón o ir a embriagarse.
Es un Londres cyberpunk que mezcla la arquitectura antigua europea con edificios y rincones futuristas, Watch Dogs Legion es definitivamente uno de los juegos que se deben jugar sí o sí. Su sistema de reclutamiento permite horas prácticamente ilimitadas de juego, además de sus divertidas misiones. Bueno, eso para algunos es un pro, para otros una desventaja.
Quizá viene siendo un poco rupturista, ya que muchas personas podrían extrañar la figura de un protagonista. En una de esas vivimos en una sociedad muy individualista, en la que la lógica de una Legión como DedSec es un tanto poco habitual, pero seguramente el futuro y por qué no, el presente: las colectividades que han guiado las revoluciones, sin protagonistas ni líderes, sino con una red.
Pasa en Watch Dogs Legion, pasa en la vida real.
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