Por mucho que nos esforcemos es imposible detener nuestro cuerpo, la sangre siempre se estará moviendo y de vez en cuando estamos obligados a respirar.
Fascinados por la imposibilidad de la inmovalidad. El colectivo Nerhol fotografió a 27 personas durante 3 minutos.
Luego apilaron todas estas fotografías de varias formas. El resultado es un recordatorio de que nuestros cuerpos van cambiando día a día.