Horas de música, sol, fans, alegría desbordante y una organización impecable marcaron la pauta de lo que sería un fin de semana lleno de sorpresas.

La verdad que para mí Lollapalooza es como ir a Disney, un universo donde la entretención y las emociones van de la mano. Si a eso le sumamos un lote de gente que siente lo mismo, el ambiente que se genera es mágico, igual que ir a una montaña rusa o el día de navidad y esto es una reseña de los momentos que en mi opinión valieron la pena en esta versión de mi festival favorito.

  • Hot Chip 14 Horas, Claro Stage

Hot Chip era una deuda pendiente que tenía. Cuando vinieron hace un par de años estaba en recuperación por una fractura, así que cuando los vi en vivo supe que la espera había valido la pena. Con un profesionalismo intachable, desplegaron una máquina perfectamente coordinada que hizo bailar a todos a pesar del calor que había. El show fue más corto debido a los cambios de line up, aún así se pasearon cómodamente por todos sus discos con la ayuda de la baterista quien es una de las New Young Pony Club y que supo darle un nuevo aire a las canciones (cosa que fue bien agradecida por los chicos presentes). Don´t deny your heart, Over and over y Ready for the floor fueron recibidas, coreadas y bailadas por toda la cancha. 10 jumbitos.

  • Two Door Cinema Club 16 Horas, Claro Stage

Si abres un concierto con Sleep Alone, nada puede salir mal.

Captura de pantalla 2013-04-10 a las 21.10.07

Los irlandeses salieron a la hora exacta y con la presión de ser una banda relativamente nueva que debía sonar bien en vivo. En una hora demostraron porqué sólo con dos discos han podido a influenciar a una camada de músicos nuevos con un sonido fresco y energético que hace desear que el verano no termine. Aunque por momentos parecía que tocaban en piloto automático, increíblemente lograron generar empatía con el público, a punta de coquetas frases del tipo hace tiempo queríamos tocar en Chile, son asombrosos, etc.

Por cosas del destino terminé al lado de la fanaticada quienes gozaron y le tiraron piropos al vocalista pero el ambiente en general era fiesta, y que fiesta.

Next Year, Sun, Something good can work y I can talk (ah oh ah ah oh fue coreado a todo pulmón) fueron los peaks de una presentación que espero no sea la última que veamos en Chile.

  • Break

Con tanto sol, baile y mi pie post fractura que estaba sentido con todo el ajetreo, fui a pelusear a la zona de prensa en busca de sombra y tuve un encuentro cara a cara con los chicos de Mecánico quienes se presentaron ese mismo día.

Mecánico

Con refrescos de por medio (gracias chicos, muy amables) hablamos de su nuevo single Oceans que fue estrenado ese día y que según sus propias palabras es una balada en la onda de Phil Collins. Llama la atención que este grupo con solo un EP y un single haya logrado  un espacio en el line up, sin embargo, con el respaldo de presentaciones en Primavera Fauna, Mysteryland y Aniversario Fauna han demostrado que tienen el talento necesario para estar en el festival por derecho propio. En cuanto al disco, pronostican que este semestre verá la luz y ojala así sea.

Entre medio también me encontré con los Red Oviblion quienes muy simpáticamente se dejaron posar y me desearon suerte en el revelado del rollo.Red Obivlion

 

  • Passion Pit 18:00 Horas, Playstation Stage

Las letras de Passion Pit son crudas, como una conversación de borrachos a las 5 am cuando pierdes los temores y hablas desde el alma, por eso era uno de mis must see y aunque tenía mis dudas de que el frontman Michael Angelakos alcanzara los tonos de las canciones, en 5 minutos mis prejuicios se borraron. El Playstation Stage desbordaba gente ansiosa de ver a la banda, especialmente a Angelakos de camisa y corbata, guapísimo. Take a Walk fue coreada como un himno, Little Secrets fue un momento para pololear (Higher, Higher fue coreado por el público desde el alma)  y The Reeling fue un reencuentro con la nostalgia y los recuerdos.

El show fue corto, 40 minutos que me dejaron con sentimientos encontrados. Un concierto preciso y bueno pero que con un par de tracks más hubiera sido de antología.

El resto de la jornada fue un deambular por el parque en compañía de los amigos. Disfrutar del atardecer y de estar sentado en el pasto. En mi experiencia la organización y la ciudad estuvo a la altura de las circunstancias.  Los grupos casi no presentaron demoras en las presentaciones, las fallas de sonido fueron pocas, los rock & recycle funcionaron bien y el staff muy amable al momento de resolver dudas.

Si, es cierto que habían filas para comprar comida y que los baños estaban llenos (el movistar era el mejor lugar para ir) entre otras cosas que escuché de concierto en concierto, pero hasta en Disney a veces fallan los juegos y aún así la gente es feliz en ese lugar.

Fotografías por J.Bruna