Amy Shark es especial: escribe, compone, canta e incluso dirige sus propios videos musicales.

Con una voz suave y letras que te llegan a la yugular, Amy Shark es una sorpresa que viene desde muy lejos. Esta australiana de Queensland tomó al mundo por sorpresa cuando en 2016 lanzó el sencillo “Adore”, que hoy tiene más de 40 millones de escuchas en Spotify y casi 8 millones de reproducciones del video de la canción en YouTube. Pero esta es una artista que conoce sus tiempos y su primer álbum fue lanzado en 2018, titulado Love Monster.

Aunque muchos dijeron que desistiera de la música, Amy nunca la dejó: “Fue importante dar un poco de luz de esperanza a otros músicos que están trabajando duro pensando que nunca van a lograrlo. Solo recordarles que es muy raro que alguien se convierta en un éxito de la noche a la mañana. Ese ciertamente no fue mi caso, yo quería que se convirtiera en un himno por muchas razones, no que fuese sobre mi margura o tener una actitud agresiva pasiva. Yo quería que fuese motivacional”.

Pero, para aclarar, “Shark” (tiburón en inglés) no es realmente su apellido. “Amo los tiburones. Vi Jaws muy pequeña, y aunque me asustó mucho en un principio desarrollé una fascinación con los tiburones. Siempre me he sentido intrigada por ellos. Elegí ‘Shark’ porque es simple y llamativo, y siento que se relaciona con mi música. No es realmente el animal lo que me importa, aunque que son muy intensos, fuertes y aterradores, sino que el haber visto esta película de tan pequeña hizo algo a nivel cerebral que es parte de mi”.

La música de Amy te llega dentro y no se va hasta que logres entender que es lo que causó en ti, y es que la cantante usa a sus canciones como un diario de vida de sus experiencias. “Ocupo mis canciones como una especie de diario de vida, aunque nunca tuve uno. Muchos músicos hacen esto cuando están creciendo, así que igual seguí esos modelos”, explicó desde Australia. La cantante toma inspiración de otros artistas que no temen expresar sus sentimiento, como Amy Winehouse, Norah Jones o raperas como Cardi B, sin dejar de lado esos referentes que la marcaron.

Amy, como muchos artistas hoy, está involucrada en todo el proceso de creación de su música, desde escribir, componer hasta dirigir sus videos musicales. “Yo editaba videos antes de ser músico, y siempre me ha interesado poner visuales a la música. Usualmente cuando escribo una canción ya tengo una idea de como quiero que se vea el video. Me gusta estar dentro de ese proceso. Me encantan los videos de música que se nota que invirtieron dinero en ellos, como los de Mariah Carey, pero ahora me siento más cercana al trabajo visual de FKA Twigs, por ejemplo, porque hay muchas formas hoy de hacer un video. Solo tienes que ponerte creativo, ver los diferentes conceptos que salen de tu cabeza”.


¿Crees que es un buen momento para ser una artista mujer?

Creo que cualquier momento es bueno para ser una artista femenina. Cuando miras a artistas como Taylor Swift, Beyoncé, Adele te das cuenta de que hay muchas mujeres en la cresta de la ola, haciendo tours, sacando álbumes. Creo que lleva siendo un buen momento desde hace rato.