Ariana Grande revivió a NSYNC en Coachella

Ariana Grande cerró Coachella 2019. La artista de 25 años hizo una pausa en medio del Sweetner Tour para presentarse frente a miles de personas en un festival caracterizado por potenciar una fuerza latina sin precedentes dentro de sus exponentes.

J Balvin, Rosalía, Mon Laferte, Javiera Mena y Los Tucanes de Tijuana fueron parte de los latinos que estuvieron presentes en 72 horas de música y fiesta, sin olvidar las actuaciones sorpresa protagonizadas por Ozuna, Cardi B y Selena Gomez cantando Taki Taki.

Durante la presentación de cierre, Grande -que se encuentra en el top 1 de Billboard gracias a su canción “7 rings”-, presentó a diferentes artistas invitados, entre ellas, su eterna colaboradora Nicki Minaj. Juntas -aunque con diversos problemas en sonido- interpretaron sus éxitos “Bang Bang” y “Side to Side” recordando los tiempos anteriores a los atentados en Manchester y otras dificultades personales que sirvieron de inspiración por los dos trabajos musicales de Ariana Grande.

El único que no pudo estar presente en esta inédita junta fue Justin Timberlake, aunque sus razones fueron principalmente por temas de agenda. Uno de los favoritos de la banda que enloqueció al mundo a principios del nuevo milenio -y que logró conseguir una exitosa carrera como solista- se encontraba en la noche de cierre de su último tour “Man of the Woods”.

Ariana incluso subió un video antiguo de ella misma siendo parte del público cuando tan solo era una niña cargada en los brazos de su mamá. Años después, se encargó de terminar la noche de forma nostálgica junto a Joey Fatone, JC Chasez, Chris Kirkpatrick y Lance Bass cantando “Tearin’ Up My Heart”.

Esperé este momento toda mi vida” afirmó al terminar la presentación.

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