Mundo tan mal hecho: atentado en Somalia deja 300 muertos

El estallido de dos camiones cargados de explosivos causó 300 muertes y más de 500 heridos en Mogadiscio. Autoridades atribuyen responsabilidad de los hechos al grupo islamista Al-Shabaab.

La cifra de muertos que dejó el atentado en Somalia durante la tarde del día sábado continúa aumentando debido a la falta de asistencia médica necesaria para socorrer a los heridos. La escala del ataque, donde un camión repleto de explosivos caseros estalló en la avenida principal de la capital, Mogadiscio, transforma el hecho en el peor ataque terrorista de los últimos años.

Esta mañana, Abdikadir Abdirahman, director de la empresa más grande de ambulancias del país, confirmó que 300 civiles murieron en la explosión y la cifra de heridos supera las 400 personas.

“La cifra seguirá aumentando debido a las personas que se encuentran atrapadas en los escombros”, agregó Abdirahman para The Guardian.

A principios de año, el grupo terrorista Al-Shabaab prometió un incremento de sus actividades luego de que el gobierno somalí y la administración Trump llegaran a un acuerdo para poder frenar las acciones paramilitares de la organización.

Fuentes oficiales también señalaron que alrededor de 110 víctimas han sido enterradas pero que otros 160 cadáveres “no han sido reconocidos ni reclamados debido a la gravedad de las lesiones que hace imposible identificar su identidad”.

Fuentes que se encontraban en el lugar de los hechos aseguran que el camión aceleró a máxima velocidad antes de cruzar un puesto de control policial, estrellándose contra una estación de servicio causando una gran explosión. La mayoría de las víctimas eran civiles que han soportado este tipo de ataques durante los 10 años que ha durado el conflicto con la organización terrorista.

La bomba, según indican las primeras indagaciones, iba dirigida al Ministro de Relaciones Exteriores somalí. La explosión derribó un hotel y los edificios colindantes a este. Los testigos describieron ver a las familias desesperadas llevando los cadáveres de sus seres queridos por las calles destruidas; también presenciaron cómo cientos de personas comenzaron a escarbar en los escombros para poder llegar hasta los heridos.

“No puedo decir nada. Lo perdimos todo” dijo Zainab Sharif, madre de cuatro niños que perdió a su marido en la explosión luego de verlo agonizar durante horas.

Muna Haj de 36 años, señaló: “El día de hoy perdí a mi hijo, el ser más querido para mí. Los opresores se han llevado su vida. Los odio. Que Alá le otorgue paciencia a todos los que han perdido sus seres queridos en esta tragedia. Rezo para que dios ajusticie a los responsables de esta masacre”.

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