Miembros del Colectivo Gamera, creadores de Baila como Quieras, nos contaron todo sobre la fiesta que este martes se realizará en el GAM.
por Niki Manzzo
DJ Maxi Cat ya está tocando en la fiesta y sus ritmos funky, disco y house tienen a las más de cincuenta personas que están en el lugar eufóricas a las 7 de la tarde. Nadie ha bebido ni una sola gota de alcohol, de hecho ni siquiera hay, y aún así improvisan cánticos sobre los tracks y bailan sin zapatos, con movimientos a veces tan estrafalarios y exagerados que si estuvieran en una discoteque hace rato le habrían pasado a llevar la piscola a un zorrón y se habría generado una pelea.
Por suerte para ellos el lugar es una casa en Miguel Claro con una sala de estar acondicionada como pista de baile, y a nadie parece importarle algo más que mover el cuerpo al ritmo de la música: solo, en pareja o en grupo, da lo mismo.
No se ve a ningún grupo de hombres trazando planes de conquista, ni siquiera gente conversando. Para eso hay un patio al que algunos salen a tomar agua. Todos los asistentes, entre los que se ven oficinistas, hipsters, jóvenes, y otra gente muy distinta entre sí, entienden le regla: la pista es un lugar sagrado durante las casi dos horas que dura el evento. Solo hay espacio para bailar.
Así fue la última versión en enero de la fiesta “Baila Como Quieras”, creada y organizada por el Colectivo Gamera, un grupo multidisciplinario dedicado a investigar, crear y difundir “arte inmersivo” en el que el espectador participa directamente en la obra.
Tal y como en otros de sus proyectos, en que los asistentes participaban de un “videojuego teatral”, o experimentaban la observación de “parafilias indómitas”, en “Baila Como Quieras” son parte de un experimento para ver cómo reaccionan las personas en una fiesta sin las características de la mayoría de las fiestas: de día, sin alcohol y con música excéntrica.
Los resultados han sido tan exitosos y el boca a boca tan favorable, que Casa Parque Villaseca y la casa de Miguel Claro, donde se hicieron las versiones anteriores, se hicieran chicos para la afluencia de gente.
Este martes 21 de marzo la fiesta se trasladará al GAM, donde estará compartiendo espacio con obras de la exposición “La Primavera de la Juventud”.
Conversamos con la bailarina Victoria de la Parra, la artista visual Macarena G. Crocco, ambas del Colectivo Gamera, y el DJ y maestro de ceremonias de la la fiesta, Maxi Cat, sobre el evento y la cultura del baile.
Las personas están concentradas en sentir su cuerpo y no en las actitudes hegemónicamente carreteras como jotear mujeres o curarse
¿Cuál es la filosofía que hay detrás de “Baila Como Quieras?
Victoria: Queríamos ver qué pasa si instalamos un espacio que no deja de ser una fiesta, pero al mismo tiempo no es una fiesta. Ver qué pasa si le sacamos el alcohol y además de eso, ponemos factores que invitan a la gente a moverse distinto, a moverse como quieran. Música distinta, un espacio amplio, cómodo. Eso va generando maneras de organizarse en el espacio a través del baile, y maneras de ver al otro distintas. Para nosotros es como un laboratorio social donde la gente se organiza a través del movimiento de manera empática.
¿Y cómo ha sido la reacción de las personas a la experiencia?
Maxi Cat: Como es de día, y como la gente quiere estar ahí, todos hacen el ejercicio de expresar lo que están sintiendo corporalmente. Ocurre que las personas están concentradas en sentir su cuerpo. No están concentradas en las actitudes hegemónicamente carreteras como jotear mujeres o curarse. Eso también lo inspiramos a través del arte, la música. Por ejemplo, yo trato como DJ de proponer y de provocar con música que buscan llevar a la gente más allá de lo que están acostumbrados en la música de baile hegemónica. Poner una cancion rara, o una que te haga bailar distinto, o que no sepas cómo bailar.
¿Cuál crees que es el principal efecto que tiene “Baila como Quieras” en los asistentes al evento?
Macarena: La catarsis que se logra a través del cuerpo. Si bien se habla de la idea de la fiesta, nosotros lo establecemos como una práctica y lo desmarcamos de la idea del alcohol. Se tiende muchas veces a llegar a la catarsis a través del consumo, pero el “Baila Como Quieras” llama a la catarsis a través del cuerpo. Bailar, bailar, bailar y bailar. Sudar, encontrarse con otro, bailar solo.
V: E irse a las 9 de la noche a la casa y al otro día estar feliz porque bailaste dos horas. Lo lindo es que movernos nos gusta a todos, por lo menos a la mayoría. Y “Baila como Quieras” también es inclusivo para niños, adultos mayores, todo el que venga a compartir.
En las discoteques el baile suele ser un trámite para la conquista. ¿Les ha pasado que gente viene a jotear a la fiesta?
V: No, eso no pasa. Y si pasa es de manera sutil, porque igual estamos relacionándonos desde el erotismo y puede ocurrir. Pero no el joteo como lo conocemos. Existe un filtro natural. Porque quizás vienen personas con esa intención pero el mismo grupo se auto regula cuando se ven en un medio en el que todos quieren bailar y bailar. Por eso hablamos de la empatía, el grupo se auto organiza de acuerdo a las necesidades de todos. Ejemplo también es que suelen formarse espacios espontáneos para personas que necesitan moverse más suave y para gente que quiere correr en círculos.
Baila como quieras en el GAM
El mundo intelectual suele subestimar al baile. Por ejemplo, en la música suele considerarse que la música “inteligente” es para escuchar y la música banal es de baile. ¿Es este evento una reivindicación de la importancia baile?
M: El baile hay que medirlo en base al marco teórico del cuerpo. Y no bajo el marco teórico del intelectual o de la crítica musical. Es bonito el Baila Como Quieras porque genera una reivindicación desde lo que es el cuerpo en si mismo, y no académicamente para tratar que los hueones ñoños vengan a bailar. Es un proyecto ingenuo y genuino que genera su propia forma de leerse.
También se considera que el chileno es tieso, tímido y malo para el baile. ¿Con lo que han observado en Baila Como Quieras, creen que se derriba ese mito?
Macarena: Si bien el chileno es muy pacato para muchos, creo que eso parte del contexto. Somos un pais al que nos falta carnaval. Los espacios de baile están super relacionados a la fiesta y la noche y a contextos muy específicos. No hay espacio para la liberación. De hecho no somos los únicos que estamos abriendo espacios para bailar de día. Esto pasa porque la gente lo necesita. Nos ha sorprendido la convocatoria por lo mismo. Acá escuchas música agradable en un espacio agradable y puedes investigar tus movimientos. Porque en la exigencia de la pista de una discoteque no puedes acceder a esos espacios de ti mismo.
¿La fiesta del GAM tendrá el mismo formato que las anteriores, o habrá cosas nuevas?
V: El formato se mantiene. Nosotros siempre tenemos guardarropía por ejemplo, porque queremos que la gente se desprenda de sus cosas. Invitamos a sacarse los zapatos. También vamos a segmentar la pista de baile como una pista de baile, es decir, un lugar en el que solo se baila. No se toma, no te paras a conversar ni nada. No habrá alcohol. Todos esos factores estarán claros en el GAM. Además es una exposición en la que van a haber más obras también, y la fiesta se dará en ese contexto.
Conoce más detalles de este carrete perfecto para empezar la semana acá.
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