Orri Páll Dýrason fue acusado por una artista de Los Angeles de haberla penetrado mientras dormía. El músico islandés negó los hechos pero renunció a la banda.

El baterista de la banda islandesa Orri Páll Dýrason ha sido acusado de abusar sexualmente de una mujer en Los Ángeles el año 2013. Producto de ello, el músico ha decidido renunciar a la banda, decisión que la banda aceptó y compartió en su Facebook: “A consecuencia de las extremadamente graves acusaciones que ha recibido nuestro compañero de banda, hemos tomado la determinación de aceptar su renuncia para que lidie con esto de manera privada”.

Las acusaciones surgieron la semana pasada, cuando la artista Meagan Boyd escribió lo siguiente en su cuenta de Instagram: “Yo estaba borracha y lo conocí en un club (hubo un periodo breve en el cual fui bailarina de un club llamado “The Body Shop”), también me besé con él antes de quedarme dormida en la misma cama que él. Desperté con la sensación de estar siendo penetrada sin mi consentimiento durante un profundo sueño…ocurrió dos veces esa noche, y me pregunté a mi misma por qué no me fui luego de la primera vez, pero estaba borracha, muerta de cansancio y en shock, y esto fue antes de que hubiese escuchado respecto de Uber o Lyft…pero nada de eso importa porque nadie se merece ser violada/tocada/lamida/penetrada sin consentimiento.

Luego la joven publicó otro post (que luego borró según reporta Pitchfork) en el cual compartía una supuesta conversación por mail con Dýrason, en donde discutían respecto de sus recuerdos de esa noche. “No puedo entender porque me estás acusando publicamente de algo que no hice”, escribió el músico acusado. “Siento mucho que estés pasando por todo esto. Pero mi experiencia de esa noche es completamente diferente a la tuya.

“Tuvimos una agradable velada pintando y tomando en mi departamente, y luego nos fuimos a la cama. Al día siguiente me preguntaste si podías quedarte, pero yo debía ir al estudio y te molestaste. Lo pasamos bien. Me gusta tu arte, creo que eres una artista muy talentosa y disfruté estando contigo”, agregó el islandés.

A eso Boyd respondió: “No estaba enojada porque tenías que irte! Estaba enojada porque desperté con un puto pene dentro mío sin mi consentimiento. Tu actuaste como si no supieras que estaba alterada. Te grité “no te tiras a la gente que está durmiendo!”. Tu me invitaste a quedarme, me pediste mi número e incluso me invitaste al estudio. LLoré todo el camino a casa y más. Estuve traumada por meses y años y no he podido olvidar lo horrible que me hiciste sentir, lo usada que me hiciste sentir y cómo te aprovechaste de mi”.

Y agregó: “Me estás manipulando. Solo admite lo jodido de lo que hiciste”.

Finalmente, el ahora ex baterista de Sigur Ros publicó en su Facebook personal la siguiente carta:

“Quiero empezar por agradecer a mis amigos y familiares por el apoyo que me han entregado. Es bueno sentir su confianza, a pesar de las serias acusaciones que se han hecho públicamente en mi contra”.

Este asunto innegablemente ha sido muy dañino. Algunos dirán que es justo, y no es mi intención discutir con esas personas. Sin embargo, solo le pido a esa gente que enfoque su rabia en la dirección correcta y se abstenga de meter a mi familia y en especial a mi esposa en esto. Al mismo tiempo, le pido a la gente que mantenga la calma y no se divida en dos ejércitos beligerantes, estas no son acusaciones en un tribunal, es la palabra de Meagan contra la mía, en Internet. Los gritos y las palabras provocadoras no juegan a favor de nadie, ni de ella ni de mi.

A la luz de la seriedad de este tema, he decidido dejar Sigur Ros. Es una decisión difícil, pero no puedo dejar que estas serias acusaciones perjudiquen a la banda ni al hermosos e importante trabajo realizado durante los últimos años. Un trabajo que es muy importante para mí.

Haré todo lo que esté en mi poder para salir de esta pesadilla, pero por respeto a la que gente que sí ha sufrido de violencia sexual, no daré esta pelea de forma pública”.

Fuente: Pitchfork.