#NetflixPedofilia.
Las redes sociales nuevamente mostraron su poder con esta severa tendencia, quizá la acusación más grave en contra de la gigante de streaming, por “promover la pedofilia” y “sexualizar a menores de edad” en sus programas.
El origen de todo es el cartel de una película documental, Cuties (Guapis en español), a estrenarse en septiembre.
La descripción original decía: “Amy tiene once años y quiere pertenecer a un grupo de chicas de su edad que bailan sensualmente, entonces empieza a explorar la feminidad y desafiar la familia religiosa”.
Luego fue modificada, junto con la foto.
Le han cambiado la descripción pero es lo mismo. @NetflixES son NIÑAS no chicas!! 11 años!! Hasta el toto de que se sexualice con normalidad a las menores. #NetflixPedofilia pic.twitter.com/QQ8O1hOuWc
— Meribey (@meribey) August 20, 2020
El fondo y lo más triste de todo esto, es que la película no tiene nada que ver con cómo fue promocionada, pero ya ha sido lapidada por Internet al punto de que su creadora debió cerrar sus redes sociales.
Se trata de Maïmouna Doucouré, una joven directora francesa de cine independiente.
La historia sigue a Amy, una niña inmigrante en Francia cuyo padre volvió a Senegal para casarse con otra mujer.
Su madre intenta actuar como si nada ha pasado, pero en realidad sufre una profunda depresión que la ha lleva a llorar todo el día y a autolesionarse.
Para evadir sus dramas familiares, Amy se incorpora a un taller de twerk. De esta forma, descubre que mientras más sexualiza su imagen, más atención y likes recibe.
Desde la inocencia y sin poseer ideas sexuales, intenta desesperadamente ser popular por medio del baile y su imagen en redes sociales.
La película aborda de forma critica tanto a la cultura islámica por su extremo conservadurismo, como a la cultura occidental neoliberal por hipersexualizar a menores de edad.
Es un documental feminista y nada tiene que ver con la fama que se construyó en redes sociales.
El problema es que la mayoría del tiempo los autores no posee poder respecto a cómo se promocionan sus obras. Ocurre con los libros y las editoriales, con los artistas y sus sellos discográficos, con las películas y sus distribuidoras.
Un ejemplo más banal fue cuando Dark se promocionó en 2017 como si fuese una serie de terror, cuando se trataba de viajes en el tiempo y lejos estaba de ser un programa que diera miedo.
En este caso, hubo algún encargado de publicidad que además de no haber visto el film, no tenía perspectiva de género, y le dio un tratamiento completamente opuesto al que plantea realmente la película.
De hecho su cartel original era algo completamente distinto.
“Lamentamos profundamente las imágenes inapropiadas que usamos para Mignonnes/Cuties. No estaba bien, ni era representativo de esta película francesa que ganó un premio en Sundance. Hemos actualizado las fotos y la descripción”, declaró públicamente la plataforma.
La película ha sido reconocida en festivales de cine independiente y ha ganado los premios a Mejor Dirección y Especial del Jurado en los festivales de Sundance y Berlín, respectivamente.