El ciclo de exposiciones 2017 estará dedicado exclusivamente a artistas mujeres.

La encargada de inaugurarlo será Francisca Aninat y su muestra estará abierta al público desde el día viernes 31 de marzo y se podrá visitar hasta el día jueves 4 de mayo.

“La falsa medida” se constituye como una extensión del proyecto “Patio de luz”, que se desarrolló durante el año 2016 en el Hospital San Juan de Dios. En aquel proyecto la artista intervino el patio de luz del hospital y durante varios meses recogió relatos de los funcionarios del establecimiento (camilleros, doctores, enfermeros) referidos a las diversas experiencias asociadas a su trabajo en el hospital, pero que escapaban a la racionalidad característica de los asuntos médicos. Los relatos dieron forma a una serie de libros, que serán parte de la exposición en D21. En dicha ocasión también trabajó con pacientes en las salas de espera, quienes creaban imágenes y objetos en base a materiales que la artista les entregaba. Las imágenes se transformaron en un archivo con el cual Aninat ha construido obras en diversos soportes. Para la actual exposición, algunas de estas imágenes fueron traspasadas a bloques de yeso que aluden tanto al comportamiento del material (el yeso respira para endurecerse) como a su uso en tratamientos médicos.

“La falsa medida” propone un contrapunto a aquellos intentos de medición rigurosa y cierta a las que están sujetas diversas disciplinas e instituciones, en este caso en particular, la hospitalaria. Para Francisca Aninat las medidas parecen ser los gestos garabateados, incomprensibles y anónimos que se apropia y replica en diferentes formatos y que tienen su origen en una comunidad en tránsito, como lo es aquella que atiborra las salas de espera el hospital San Juan de Dios. Los libros contienen historias ‘no oficiales’, aquellos rumores que circulan y respiran, así como los bloques de yeso, hasta tomar consistencia y realidad.

La muestra exhibirá también una serie de artefactos en desuso, característicos de otra época del hospital, los cuales han sido intervenidos con el fin de resignificarlos, dando cuenta de sus usos pasados y de los relatos que circulan en torno a ellos, reconstruyendo así en las salas de D21 parte de la experiencia de la intervención “Patio de luz”.