Conversamos con Daniela Vega, protagonista de “Una Mujer Fantástica”. Pocas veces el título de una película había calzado tan bien con la actriz detrás del personaje.

Nos juntamos en el Zully para realizar la entrevista. Desde el primer momento que nos encontramos con ella, supimos que estábamos frente a un nuevo concepto de diva. Una diva humana, consecuente y talentosa por donde se le mire.

Hablamos de Chile, de las fiestas en el Teatro Carrera, del rol que cumplen los artistas transexuales en Latinoamérica, de las nulas leyes de nuestro país en defensa de las personas trans, y obviamente, de “Una Mujer Fantástica”.

La quinta película de Sebastián Lelio está inspirada en una historia de amor, como muchas películas que se pueden ver hasta en las pantallas del metro. El valor diferenciador es lo que ocurre de alguna manera en el Chile de hoy. Pero más que una denuncia a la violencia diaria que reciben las personas trans en Chile y todo el mundo, es poder cuestionarse esos espacios de moral, dignidad y empatía para abrir una ecuación más que responderla. Daniela afirma: “La película funciona como un termómetro, más que como un espejo, y nuestra intención, claramente, es que vaya mucha gente al cine a vernos. Pero también es a remecer, un poquito, ciertas conciencias, ciertas cabezas. Estar del lado de nosotros o estar del otro lado, es una opción, pero…¿qué pasa cuando esa opción radica en la libertad del otro?”

La invitación de Daniela Vega

Otro tema que no se podía quedar fuera de nuestra conversación, es qué opina sobre el empantanado camino por el que transita el proyecto Ley de Identidad de Género: “Es importante y urgente que se apruebe porque las personas transexuales en este momento se están muriendo esperando a que eso ocurra. Cada fin de semana hay ataques transfóbicos que no salen en la prensa, y es porque las personas trans estamos más en el borde de lo que se cree. El Estado de Chile es inoperante en este y en otros temas, falta voluntad política para terminar con la tarea. Yo no puedo creer que aguantemos que la comisión de Derechos Humanos no llegue nunca a la sala y nunca haya quorum para discutir la Ley”.

“Yo hago la invitación a las personas que no son transexuales a intentar empatizar con esta realidad. Y hago la invitación a los senadores a que hagan el trabajo que tienen que hacer. Hay mucho más que ropa detrás de estos cuerpos, hay mucho más que maquillaje detrás de estas mujeres. Hay una vida que respetar. La derecha es tan provida, pero el problema que tienen es que son Pro-vida de algunas vidas y no de todas las vidas. ¿Dónde está el amor de Dios en esa mirada?”, pregunta antes de despedirse.

Créditos video

Styling: FeriaFerió

Make-up: Javi Kastner

Locación: Restaurant Zully