El 10 de octubre del 2010 se estrenó la cuarta generación de monitos animados de la serie “Mi pequeño Pony”, que se llamó “Mi pequeño pony, la magia de la amistad”.
Luego de un par de días, en varios foros de internet empezó a circular el término “brony”, mezcla entre “bro” (abreviación de hermano) y “ny” (por pony). Este grupo de bronies empezó a crecer rápidamente, convirtiéndose en fenómeno de internet.
Y acá se pone extraño. Cuando decimos “bronies”, estamos hablando de un grupo de hombres adultos, que va desde los dieciocho hasta los cincuenta años, que se junta a ver una serie hecha directamente para niñas de tres a cinco años. Ellos se defienden diciendo que la historia de “Mi pequeño pony, la magia de la amistad” está llena de chistes para adultos, tramas bien buenas, etc.
Los bronies se toman muy en serio la serie. Como todo grupo de fanáticos, llenan internet de material sobre la serie. Remixes, fotos, videos, de todo. Incluso cada año hacen la BroniCon, donde se juntan a hablar de “mi pequeño pony”.
El problema es que los tipos son freak. No quiero juzgar, pero son freak. Y como toda la gente freak, empezaron las fotos y videos freak.
Primero empezaron los disfraces, o cosplay:
Luego se empezaron a photoshopear con los pony como si fueran amigos:
Luego como si estuvieran pololeando con un pony:
Después, como todo hombre, quieren tirar con su pareja:
Y al final ya se fueron a la mierda:
La manía de “mi pequeño Pony” también está presente en Chile. La página de fans en Facebook ya tiene casi tres mil seguidores. Es una comunidad súper activa donde comentan la serie y hacen chistes internos.
- ¿Es normal ser fanático de una serie así?
- ¿Dejarías que tu hijo arme fleshlight parties con ponies?
- ¿Hacen los bronies que un otaku luzca inteligente?
- ¿Te acuerdas de los cholombianos?