La basura es un problema que afecta al mundo entero y al que simplemente ya no podemos seguir ignorando o sin darle la importancia que se merece y la urgencia a un soluciones reales. A lo largo de la historia se ha acumulado como resultado de una escasa responsabilidad social e insuficientes programas de sustentabilidad. Como referentes y ejemplos a seguir, te mostramos el trabajo de tres artistas que han logrado darle otro rol a la basura a través del reciclaje. Con sus trabajos, hacen un llamado a la sociedad sobre la urgencia de convertir a la basura en algo más que un desecho.
Bordalo II
Basura camuflada se transforma en lo que Artur Bordalo quiera. El artista portugués más y mejor conocido como Bordalo II describe este tipo de instalaciones como “collages” de objetos que reúne de lugares abandonados y descuidados y que con la ayuda de una pared, logra montar diversos materiales para luego rociarlos con spray de diferentes colores. Bordalo II busca una interpretación propia del paisaje urbano y está claro que lo logra a su modo.
Combina el reciclaje con la escultura, la pintura, el collage y el graffiti para construir obras de gran tamaño que revitalizan espacios urbanos.
La basura que utiliza, más allá de ser una manera de reciclarla, es una crítica al deseo interminable de los seres humanos por tener “cosas bonitas” sin ser conscientes de que esos objetos irán a parar tarde o temprano a vertederos colapsados.
Alejandro Durán
Es un fotógrafo, cineasta y poeta mexicano que crea esculturas e intervenciones con basura. El objetivo principal es crear conciencia sobre los efectos de ésta en el medio ambiente. Busca obligar al espectador a reflexionar sobre la relación que tenemos con las cosas; la manera en que utilizamos y desechamos las cosas sin pensar en dónde terminan éstas.
Bernard Pras
Cuando veas el trabajo de Pras vas a darte cuenta que está inspirado en el trabajo del pintor renacentista Giuseppe Arcimboldo (quien componía retratos a partir de flores, frutas y vegetales). Este francés utiliza la técnica de la anamorfosis que consiste en juntar muchos objetos cotidianos para conseguir la sensación estar viendo una imagen pero que la mayoría de las veces son instalaciones creadas a partir de desechos.
Cualquier objeto tiene cabida en la construcción de sus obras: cables, juguetes, latas, papel higiénico o herramientas forman parte de estas especies de collages en diversas dimensiones que casi siempre son personajes ficticios; las caras de íconos musicales; escenas clásicas del cine o recreaciones de populares obras de arte.
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