La moda al día.

Este año se vieron muchos estilos diferentes, las modas se reinventaron, otras volvieron, aparecieron nuevas maneras de gestionar la indumentaria, el vestuario y la tecnología también jugó un papel importante. Gracias a Instagram las tendencias se masificaron y encontraron nuevos nichos en todo el mundo.

La plataforma de moda, estilo y vestuario Lyst reunió los datos de los 80 millones de compradores de 120 países, logrando conglomerar 100 millones de búsquedas lo que les permitió analizar las consultas, las visitas, los datos de ventas, las redes sociales… Fueron 5 millones de productos de moda, más de 12 mil diseñadores y tiendas que van desde Dior al Dadcore, del plástico a la madera. Estos datos revelaron todo lo que se usó y lo que trendeó este año.

“Este año hemos visto a Instagram desarrollarse como una poderosa fuerza de la moda, marcando tendencias y aumentando las ventas. Para tener éxito en el feed, las marcas se han centrado en los gráficos y logotipos de streetwear como memes transmisibles, lo que ha generado una gran tendencia de logomanía y un renacimiento estético de los 90/00”, dijeron en la página.

Y agregaron que “Las celebridades, y sus atuendos, siguen siendo los influyentes más poderosos que dan forma a lo que los clientes buscan comprar en línea. A través de publicaciones de Instagram cuidadosamente curadas, gente como Kylie y Kim consiguieron comprar en el mundo y fueron responsables de algunos de los mayores picos de búsqueda de 2018”.

Moda Meme

Este fue un año en el que la viralidad se tomó la moda. La cultura meme reunió el diseño, los productos, el estilo, la perspectiva, el humor e Internet dando como resultado a un público más enfocado que nunca en la moda y muchas veces sin saberlo.

Balenciaga sacó una chaqueta de siete capas que se volvió viral, también un estuche con agujas. Vetements sacó un vestido de guante de Spiderman, todo muy raro. Gucci sacó un pasamontañas gigante. Las marcas de ropa se volvieron un meme y gracias a eso las búsquedas se dispararon y tuvieron más presencia que nunca en la web.

90/00

Desde las susaderas con capuchas hasta las sandalías con calcetines, los aros dorados y los calzoncillos, todo, absolutamente todo aunque sea en una mínima cantidad volvió en una máquina del tiempo desde los 90 y el 2000.

Fue un mix entre la industria cultural de los 90. Netflix “arrendó” Friends por muchos más meses para no perder subscripciones, Kim Kardashian usó una Tanga de Gucci que usó en los 90 y Dior trajo de vuelta su bolso Saddle.

Deportivo de lujo

Este año más de un 62% de las etiquetas en Lyst respondieron a Ropa Deportiva o Streetwear. La gente está comprando más ropa deportiva que nunca, de hecho el precio de los leggins aumentó 60%, de 58 dólares a 93.

Cada vez son más las marcan que optan por sacar una línea deportiva o más ligera haciéndola lucir como un lujo como Louis Vuitton.

Neón

Los productos en color amarillo y en café crecieron en popularidad, pero las piezas de neón en particular y con más fuerza que nunca sufrieron un aumento del 120% de búsquedas de moda, todas después de que los influyentes Black Lively, Bella Hadid y Kim Kardashian aparecieran en público usando neón.

En septiembre fueron 20,000 las búsquedas de ropa con color neón, y la bolsa de concha de neón de Prada fue la más vista del año.

Otros estilos exitosos

Artsy

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Fue Timotheé Chalamet, James Ivory hasta Victoria Beckham quienes usaron ropa con bocetos de ilustraciones, al más puro estilo Do It Yourself.

Céline utilizó vestidos pintados con pinceles y fue el vestido de segunda mano más buscado; mientras que JW Anderson usó unos aros con forma de luna que fueron los más buscados del año.

Plástico

La bolsa de plástico que sacó Shirley de Staud tuvo más de 5000 búsquedas en la semana de la moda en Nueva York. Los tacones de plástico que lanzó Jimmy Choo x Off-White fueron los más buscados de febrero. Todo el mundo de quería plástico en su ropa.

Dadcore #1

No fueron ni las zapatillas de Kanye West, ni el neón ni el plástico ni la ropa hecha a mano ni los abrigos más caros o los vestidos más voluminosos los que estuvieron en el número uno y por sobre todas las tendencias este año. Fue la moda que hace referencia a vestirse como un papá. Las zapatillas de papá, los jeans hasta la cintura, las poleras por dentro, ese normcore post 30 años.

Fue el año de los comebacks, claramente. Fendi, Versace y Prada volvieron a estar entre los más buscados; sacaron colecciones para el recuerdo honrando sus colecciones más iconicas, pero el dadcore: las zapatillas feas, volvieron con más fuerza y la rompieron.

Las camisas y poleras “feas”, los cardigans holgados, los vellones, el estilo extra de padre de los 90 volvió con más fuerza que cualquiera. Las búsquedas aumentaron en 439% lo que convierte esta moda en la moda del 2018.

Los esenciales del dadcore

De día

Botins abigarrados y pantalones sueltos hasta la cintura.

De noche

Una chaqueta, una camisa, y el resto del outfit como si fueras a trabajar a una oficina.

De-portivo

Sombrero de cubo, short hasta la rodilla y ajustado a la cintura, una guayabera y gafas pequeñas con zapatillas blancas, grandes y monstruosas.