Y a quien no le gustó esto fue al pastor y líder político Silas Malafaia, dándole crédito a la influencia de los “izquierdópatas”.

Camila Mantovani, creadora del Frente Evangelica pela Legalização do Aborto. Foto: Leo Martins / Agência O Globo.

Esta nota fue publicada originalmente por Débora Lopes en Vice Brasil. Esta es una traducción.

Una de las mayores barreras para el avance de las políticas públicas, proyectos de ley y modificaciones en pautas relacionadas a las mujeres, es el peso y la fuerza que los evangélicos tienen en el Congreso Nacional en Brasil. Para revertir ese escenario conservador, mujeres evangélicas de Brasil se organizaron y, en octubre del 2017, levantaron la bandera del “Frente Evangélica por la Legalización del Aborto” (FELA). A pesar de su poco tiempo de existencia, los peces gordos ya están incómodos. En un video, el pastor e influyente líder político Silas Malafaia, criticó la iniciativa, considerándola “influenciada por los izquierdópatas”.

Silas Malafaia, pastor y líder político en Brasil.

Quince mujeres de distintas iglesias integran este frente, que empezó a movilizarse en Rio de Janeiro y ya está en estados como Bahia, São Paulo y Minas Gerais. “No estamos a favor del aborto, pero sí de la despenalización de las mujeres que lo practican”, dice Camila, integrante de 23 años. Para ella, existen distintas opiniones y posiciones políticas entre los adeptos a la religión: “Los pastores mediáticos de las grandes iglesias neopentecostales, creen que pueden hablar en nombre de todos los evangélicos, pero no pueden”.

Vice Brasil conversó con Camila para entender cuáles son los objetivos de FELA y cuál es la importancia de las evangélicas posicionándose sobre el aborto.

El colectivo brasilero de “Católicas por el Derecho a Decidir”, nació en los años 90. ¿Fue una inspiración para FELA?
Sí. Ellas son una gran inspiración. Somos como las hermanas recién nacidas de las CDD. (risas)

¿Cómo y cuándo surgió FELA?

En octubre del 2017, después de que algunas de nosotras trabajamos en las articulaciones sobre la ADPF 442 (acción enviada por PSOL (Partido Socialismo y Libertad) al Supremo Tribunal Federal, justificando que dos artículos del Código Penal, relacionados al aborto, violan la Constitución Federal), y nos dimos cuenta que el mayor obstáculo para el avance de acción eran las iglesias evangélicas, que firmaban como enemigas. Sentimos la necesidad de organizarnos en torno a este debate.

“El mayor miedo es de las represálias de los grupos fascistas evangélicos”

¿Cómo es la vida de una mujer evangélica, que se dice estar a favor del aborto, para su comunidad religiosa?

Primero, es importante aclarar que no estamos a favor del aborto, pero sí de la despenalización de las mujeres que lo practican. Depende mucho de la comunidad en la que cada persona construye o frecuenta. En mi comunidad, por ejemplo, no existe cualquier resistencia, mi iglesia es una de las que hoy firma como Amicus Cureae, pero en la mayoría de las iglesias, hay mucha resistencia y discurso de odio.

¿Ustedes tienen miedo de sufrir represalias en las iglesias que frecuentan? 

El mayor miedo que tenemos es de las represalias de los grupos fascistas evangélicos (por más contradictorio que sea, existen). Eso nosotras lo sufrimos constantemente. Las amenazas son una constante para nosotras, infelizmente.

¿Y cuál es la importancia de hablar sobre este tema para las mujeres evangélicas?

Hoy en día existe un grupo hegemónico en la iglesia evangélica, extremadamente autoritario, y que se atreve a hablar por toda la iglesia, pero la iglesia es muy diversa, tiene posicionamientos políticos y teológicos muy distintos, no puede ser posible que un grupo quiera hablar por todos… es absurdo, la verdad, pero los grupos más fundamentalistas creen que así tiene que ser. Los pastores mediáticos de las grandes iglesias neopentecostales creen que pueden hablar en nombre de todos los evangélicos, pero no pueden, y nuestro frente surge exactamente para decir eso. Que esos pastores no nos representan a todos.

“Nuestra evaluación de la bancada parlamentaria evangélica sobre cualquier pauta, que dirá en la pauta de opresiones, es que ellos son un escarnio para la iglesia evangélica brasileña”

La bancada evangélica tiene una fuerza y poder indiscutible en el Congreso Nacional. ¿Como ven ustedes la acción de esos políticos cuando las pautas son relacionadas a las mujeres?

Nuestra evaluación de la bancada parlamentaria evangélica sobre cualquier pauta, que dirá en la pauta de opresiones, es que ellos son un escarnio para la iglesia evangélica brasilera. Son personas que actúan según sus propios intereses, hambrientos de poder y que legislan en nombre de la justicia. Son personas que transforman la fe como una herramienta para implementar sus nefastos proyectos de poder. Pero como dice el profeta Isaías:  “Hay algunos que crean leyes injustas y que escriben decretos opresores para privar a los pobres de sus derechos y de la justicia a los oprimidos de mi gente”.

En un video, el pastor Silas Malafaia critica una probable mención del Frente Evangélica, sobre cómo el aborto es visto en la Biblia ¿Qué les pareció su respuesta?

La posición de él es su posición de siempre: odio. El discurso de él se fundamenta en una lectura violenta y opresora de la Biblia. Él es uno de esos grandes pastores mediáticos que predican en base a sus propios intereses. Él tal vez sea uno de los mayores símbolos, hoy en Brasil, de liderazgo evangélico corrompido que se postró para adorar al dios capitalista y aún así se atreve a hablar en nombre de Jesús. Una contradicción completa con lo que un seguidor de Cristo debería vivir y predicar. De la boca de él sólo sale odio. No es evangélico, es su ego en un proyecto de dominación que no tiene nada que ver con el Dios en el que creemos.

“Él (Malafaia) tal vez sea uno de los mayores símbolos, hoy en Brasil, de liderazgo evangélico corrompido que se postró para adorar al dios capitalista y aún así se atreve a hablar en nombre de Jesús”

¿Cuáles son los objetivos del Frente para futuro? 

Fomentar el debate sobre los derechos humanos que hoy en Brasil son negados para nosotras, las mujeres. Incentivar a las iglesias a pensar sobre este debate a través de una teología no patriarcal ni arcaica. Fortalecer las articulaciones políticas, que nos permitan cambiar la legislación actual y despenalizar el aborto para poder garantizar vida, y vida en abundancia para todas las mujeres.

Si quieres saber más sobre el Frente Evangélica por la Legalización del Aborto, puedes entrar a su Facebook.