En esta entrevista, Rodrigo Sobarzo nos cuenta más de esta nueva obra que se estrenará en el Centro de Creación y Residencia NAVE en dos funciones únicas este sábado 25 y domingo 26 de agosto a las 20 horas.

Por Consuelo Laclaustra.

Tras vivir los últimos años en Europa, el artista nacional Rodrigo Sobarzo vuelve a Chile a radicarse y para presentar su más reciente creación mUseo de AguA, una propuesta escénica única donde una cisterna con 10 mil litros de agua, músicos emergentes locales, y su cuerpo frente a una audiencia reducida se juntan para crear una experiencia única.

¿Qué pasa cuando un artista vuelve a sus raíces? ¿De qué manera un elemento puede marcar su trabajo en lo que consta su carrera? ¿Cómo se introduce nuevamente un reincidente a una escena local donde se ha hecho ausente por años?

Para su propuesta, Rodrigo Sobarzo pondrá en escena una cisterna que tiene una
capacidad de 20 mil litros, pero donde solo llenará con 10 mil litros para generar la
sensación de suspensión que requiere su performance. Además, por primera vez en toda su trayectoria el creador nacional trabajará con otros artistas, esta vez del mundo de la música, para su obra en vivo. Parte de esta instalación performática consiste en tener música al interior de la cisterna y música en vivo desde afuera de la estructura.

En esta ocasión, el artista trabajará con Syntrovert para hacer el mix de sonido y para la presentación en vivo estará cantando Romeo.

Con respecto a cómo es el enfrentarse a la audiencia local, Sobarzo explica que su
performance gira en torno a la ausencia y el sentir desde la empatía: “Esto tiene que ver con la acumulación, y creo que este es uno de mis trabajos más radicales porque me muevo en torno a la presencia y la ausencia. Las personas (público) ni siquiera me verán la cara, ya que la idea es usar un cuerpo sin corporalidad y sin una sicología. No sé si va a conectar con la gente o las va ‘a tirar afuera’, siempre va a estar esa dualidad entre que le resuenen a algunas personas y que otras lo encuentren poco teatral. No sé cómo será el intercambio y cómo va a ser esto, pero tengo ganas de explorarlo“.

Además de la propuesta escénica, existe para Sobarzo una segunda parte de su
investigación que tiene que ver con el trabajo colaborativo y lo que pasa con el agua
después de las funciones.

“La investigación que me tiene súper ocupado es pensar en la sustentabilidad del
trabajo. Desde que llegué a Santiago me he preguntado, ¿qué se hace con el agua
después? Una de las ideas era pensar en lugares históricamente sobrecargados con
memoria, como la ex penitenciaría, o un lugar así y agarrar toda esa agua y
simbólicamente dejar que limpie o vierta ese espacio, en la forma de una cascada. Pero
este contexto lo hace más difícil, entonces pensé en lo que pasa acá, y como los autos o la carretera es ese flujo constante. Es más, usaremos un auto dentro de mUseo, que
complementa la cisterna y los músicos locales”, dijo.

“La idea es trabajar sutilmente con la aceleración y desaceleración, y que el cuerpo pueda a través de esto procesar todas las cualidades del agua, que claro cuando estamos metidos adentro es más el contacto lo que te hacer sentir que lo que observas. La ciencia siempre sustrae algo para poder observarlo o valorarlo, entonces la idea es conectar a la gente a través de la memoria. Esta es la primera vez que hago esto, así que recién para las funciones veré si funciona o no con público”.

Sobarzo quien en un principio contaría con sus propios medios para realizar su residencia y posterior obra, fue becado recientemente con la Beca de la Fundación Mustakis que apoya el proceso de creación de artistas locales que estén realizando sus proyectos en NAVE. Esto le da facilidad de explorar en escena todos los elementos mencionados anteriormente a través del distanciamiento.

Rodrigo, ¿de dónde viene la idea de trabajar con el elemento del agua?

Viene simplemente de la curiosidad de qué tan factible es que el agua, como agente, trabaje con la vida y la tierra, supuestamente. Pese a que es un tema súper vasto, yo lo vi desde un punto de vista más relajado, donde por ejemplo en este caso (mUseo de AguA),
sería netamente un trabajo en torno a la fluidez y la calidad del movimiento que genera el agua. La idea es trabajar en una pieza donde la gente no vea el agua directamente y es por eso que esto va a suceder con un estanque sellado para que las cualidades del elemento se vean a través del cuerpo.

¿Qué significa para ti haber convocado a artistas nacionales para ser parte de tu pieza?

No me hace sentido seguir haciendo obras pequeñas y cosas separadas, ya que si no
viste la obra, lo que hiciste simplemente no existe. Es por eso que quiero que mi trabajo se transforme en una plataforma, donde pueda mostrar la creación de otros artistas. Y en este caso, llamo a dos chicos para que se haga un mix al interior y otro cante sus temas desde afuera, entonces claro la idea es incorporar la gente local de las generaciones más jóvenes, para que tengan un espacio de difusión. Esta será la primera vez que lo haga.

La performance de Rodrigo Sobarzo corresponde a una segunda obra presentada al interior del espacio NAVE, primero en 2017 en el Ciclo OtroSur con su pieza A P N E A, y este fin de semana con el estreno de la obra. Para ganar entradas dobles, puedes entrar al Facebook o Instagram de NAVE para participar.

Fotos: Isabel Ortiz Carvajal