El fotógrafo de Brooklyn Rob MacInnis realizó esta conmovedora serie de fotos en las que ovejas, vacas y cabras fueron liberados de sus corrales, desafiando así el ritual del consumo humano. The Farm Family es su nombre.
Entre fardos de heno y bodegas, las humildes bestias se encuentran repentinamente frente a luz artificial y una cámara, construyendo escenas dignas de Vogue, Vanity Fair o campañas de Tommy Hilfiger, aunque el trasfondo es mucho más interesante que eso. El trabajo de Rob más que ser estéticamente perfecto, juega con nuestra conciencia y cuestionamientos: cada animal posa perfectamente alineado y vulnerable, pero su inevitable destino simplemente te deja mal, tal como los problemas tratados en Babe, el cerdito valiente.
Visto en Huffington Post
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