Conversamos con Horridia, Feocia y Mari-Crimen sobre su último disco “Lo Normal” y nos contaron de sus más recientes show donde han estado acompañadas de las Doris Dana, un grupo que traduce en lenguaje de señas sus canciones en vivo.

Horridia, Feocia y Mari-Crimen son tres lesbianas que hacen música y ya van con su segundo disco de gira por Argentina después de un exitoso lanzamiento en Chile.

Cuesta encontrar música que de manera divertida sepa ponerte a bailar mientras escuchas una crítica lo suficientemente potente como para quedarte pensando sobre feminismo, sistemas opresores, homo y hetero normatividad.

Su primer disco, Pasarela Fracaso, las llevó por Chile como la nueva banda fem-rock emergente. Todas venían desde lugares diferentes, pero el lesbianismo las unió.

Su segunda producción Lo Normal, es un disco dedicado a Nicole Saavedra Bahamondes, porque la torturaron y la asesinaron por ser lesbiana y aún no hay justicia.

Cuando les hablé a Las Horregias decidimos basar la entrevista en dos ejes: Música y Lesbianismo, también como la propuesta que les ha funcionado de manera perfecta, una trinchera que puede ser peligrosa.

“El peligro que trae lo conocemos desde niñas y lo seguimos viendo hoy. Es algo con lo que convivimos en el bus escolar y ahora tomando el metro después del ensayo. Hacemos lo que se nos canta porque queremos recuperar un espacio para las lesbianas. Un día decidimos llegar más allá en lo horregio, en lo que es tan lindo que es horrendo y al revés. Y otro día decidimos ser lo más lesbianas posibles por todas las que no pudieron, porque nos hicieron invisibles”, explican.

En sus performances son mujeres en escena mostrando todo lo que se oculta. Mujeres bailando bailando siendo ellas mismas mientras muestran la realidad de la menstruación.

“Si cuando chica te gustaba la vecina y ya sabías de rebeldías, ¿qué te dio por la vida heteronormativa?” cantan y sigue “Dale, dale Don dale, no soy un genital andante, soy alguien inteligente. Desde que nací un rol yo recibí mi mamá se quejaba ‘como hombre te vestís’ papá, mamá, rakata, rakata, heterosexualidad: funcionamiento de la sociedad. Dale con el látigo a su mentalidad, mucho patriarcado y caballerosidad y rompe rompe su moralidad, rompe, rompe, su mentalidad. Importa quién yo soy, no a quién voy a culiar”.

Todo lo que cantan lo hacen desde ese espacio, desde el ser lesbianas y llevar un mensaje lesbiano y feminista a otras de sus amigas, del amor de amigas, de hacerse cariño, erradicar prácticas violentas y salir de la heteronorma. “Que ningún caminón crezca sin poder decir que es un caminón y que a nadie le cueste encontrar bandas de lesbianas cantando sobre lesbianismo y lesbianizando el mundo”, explican.

Con sus nombres parecen bautizadas por el matón del curso. Es la idea, porque también representan personajes dentro del lesbianismo en el mundo. No son sólo estos los nombres que tienen, usan varios, y si llega alguien que es amigo de la banda también le dan un nombre y lo transforman en un personaje. Están lejos de la burla y más cerca de la celebración a lo horrendo.

En este disco, Lo Normal, se nota una relación entre amigas, es una retroalimentación que va desde lo individual a lo colectivo, se trata de asumir la madurez porque “no basta con llamarse lesbiana y vivir fuera del clóset para ser política”.

“En el feminismo el 2014 nos hicimos amigas lesbofeministas, transfeministas y feministas, como el camión alto la Elisa Rojas, las lesbianas de Concepción, cuna de lesbianas, la Javi Tapia, Las Grasas Trans, la misma Dadalú. Antes lo hacíamos todo desde el lesbianismo, todo muy político pero un tanto visceral, más sobre lesbianizar y ser visibles que otra cosa. Hoy está eso y también una reflexión quizás un poco más profunda. No sé. Lo importante es que tratamos de aplicarlo, de cuidar a nuestras compañeras, de tratar de hacer espacios seguros de la violencia machista, de revisarnos a nosotras mismas, de no repetir prácticas patriarcales sobre otres. Es algo muy interesante, doloroso y lindo conocer a tu compañera desde el feminismo, pero es perfecto y es la forma en que nos interesa relacionarnos con la gente”.

La escena está dominada por varones, responden, que son cisexuales y hetero. “Las lesbianas dónde están?'”. Quieren que sus seguidoras entiendan que cualquiera puede hacer una banda y también que las lesbianas se deben motivar y hacer 200 bandas, que graben con sus amigas y que siempre prefieran tocar con más lesbianas y hablar sobre eso.

Sin duda tienen mucho que decir y se inspiran de otras bandas como Las Grasas Trans, Nihilisa Simpson y la Negrah Liyah, la Colombiana Parra, Javiera Mena, Cecilia la incomparable, Kathleen Hanna, Rosario Bléfari, Juana Molina y Dadalú.

Son rock, pop rock, rock alternativo, música alternativa, pop-punk-rock-camión-lésbico del cerro de Renca. “Todo al mismo tiempo, la raíz o la génesis parte del interés por la música del movimiento de post punk que escuchábamos cuando éramos adolescentes, parte de eso tiene que ver con que es música más amigable para tocar, es decir, no hay que ser un tremendo intérprete para poder hacer algo un poco parecido”.

“A esta altura y con todo lo que pasa en la música, que me da una sensación tan vertiginosa, es más difícil autoclasificarse en un estilo, porque en este último disco hay un intento de reggeaton, que más allá de que sea un experimento de tratar de usar la mayor cantidad de clichés de ese estilo, también hay una necesidad de salir del sitio de confort, tocar un estilo desconocido donde no necesariamente vayas a sentirte cómoda tocándola. Por eso usamos en el comunicado “Pop punk rock camión lésbico del cerro Renca” metiendo la mayor cantidad de palabras y conceptos que nos identifican y nos interesan, independiente de que nos salga muy bien ejecutado o que te digan, no va a poder ser”, continúan.

En el lanzamiento del disco Horregías tenían un coro particular. Sus madres. Querían un coro femenino con voces de señoras. “Se nos ocurrió hacer un coro femenino de voces de señoras, nos interesa traer al universo del punk, el pop y el rock las voces de señoras, especialmente también porque nosotras mismas nos consideramos riot srrras”.

Se presentaron a sus madres, luego de haber estado continuamente hablado de ellas, sacándolas a colación. En todo este tiempo no se involucraron tan íntimamente como ahora. “Piensa que a estas señoras les ocultamos nuestro lesbianismo alguna vez”.

Las tres madres son sujetos muy diferentes entre ellas y entre Horregias. “Es posible que las tres hayan esperado algo diferente de nosotras, que fuéramos más femeninas, que tuviéramos estabilidad económica, que hiciéramos guaguas, y nosotras les presentamos algo muy alejado a eso”.

Si algo les preocupa además de hacer la música que quieren es poder incluir a todas aquellas que necesitan estar en un espacio como este. En sus conciertos tocan con Las Doris Dana, unas mujeres que hacen lengua de señas y que cantan con sus cuerpos para quienes no pueden escuchar.

Las Doris Dana hicieron las lenguas de señas en el lanzamiento ¿De qué manera Horregias se enfrenta a la inclusión? ¿Por qué?

La inclusión nos llegó porque Daj Dana (Daniela Aravena) llevó al Femfest la interpretación musical en lengua de señas chilena y nos presentó a varias personas sordas, intérpretes geniales y chiquillxs que disfrutan de la música, la mayoría de la asociación Crea.

Lo bueno es que después de la experiencia del Femfest 2016, Daj Dana insistió en que continuáramos haciendo los conciertos con interpretación en lengua de señas para siempre y se encargó de juntar Doris Danas.

Nos hemos presentado con las Doris Danas hasta en Argentina porque hemos coincidido con ellas en espacios feministas, por ejemplo, con Karen Camión Inclusivo Dana o Askatia Dana. Vieja Adriana, parte del coro Cumbre de Madres por el Lesbianismo y madre de Feocia, es profesora diferencial y todo el tiempo nos motivó a ser inclusivas en todo aspecto. Es importante que la música y la información esté disponible para todxs, no solamente para un grupo privilegiado.

Hoy nos van a ver las personas sordas porque el grupo de las Doris Dana interpreta bakan y es un placer verlas. Además siempre están sumando, interpretando no solo el mensaje sino que la música misma en sus cuerpos. Ver lesbianas sordas en los conciertos es espectacular. Pensamos también en lo difícil que fue para nosotras desde chicas acceder al lesbianismo siempre tan invisibilizado, encontrar información, escuchar bandas que hablen desde ese lugar, y para una persona en situación de discapacidad es más engorroso aún.

Hay que erradicar el capacitismo e involucrarse en crear una cultura más inclusiva. Pienso que todas las bandas deberían estar en eso. Es muy difícil parar un concierto, lo tenemos claro, pero hay que hacerlo inclusivo.

El próximo single que se viene es Humor Negro, una canción que hicimos porque un chongo patético me dijo una vez que sus comentarios misóginos y machistas eran humor negro y me tenía que reír. Me piqué para siempre y cuando Horridia Parra encontró esa melodía, hicimos esa canción. Tendrá un video clip dirigido por la misma Mari-Crimen Kraken Kruger.


Desde el 20 de octubre, aproximadamente, podrás escuchar su música en Spotify. Mientras tanto puedes reproducir sus discos en su página web.

“Ahora estamos en Buenos Aires, Argentina. Vamos a ir a tocar al Chaco al Encuentro Nacional de Mujeres y a Uruguay al primer Encuentro de Mujeres de allá si todo sale bien. Tenemos fechas con Las Grasas Trans y Nihilisa Simpson, gente que adoramos. Al regreso tendremos una fecha en combinación con las cabras del humor. Lo hablamos antes de irnos. Lo dije y qué”. finalizan.


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