Al principio era divertido pero ahora terminó siendo agotador. Los anuncios de Wish son inexplicablemente ridículos, y varias stories de Instagram comparten su contenido que va desde correas para pasear gallinas hasta pijamas muy palurdos con aperturas en la zona genital.
Pero ahora Wish incluso bordea en lo poco ético y hasta asqueroso. Sus anuncios escalaron desde juguetes sexuales hasta pequeñas escobas para limpiarte las uñas (sí, un a por una), y además sus anuncios proliferaron apareciendo por doquier y no tan solo en Facebook.
No Wish, no quiero comprar un auto eléctrico en miniatura o maquillaje para gatos por mucho que cueste 2 dólares. Eres muy amable en ofrecerme abrigos con fotos de Pablo Escobar, pero Thank You Next.
Pero Wish es majadero porque ha invertido mucho dinero en serlo, tanto que su contenido sale de control incluso para los mismos organizadores. La compañía cuenta con 8 billones de dólares, compitiendo con Amazon para ser el sitio de ventas online por excelencia. La ventaja radica en que los productos se envían directamente de las fábricas en China, pero debes ser paciente: todo se entrega en un plazo de 14 días o más.
Son los propios vendedores de Wish quienes gestionan los productos y los envíos de estos mismos, porque Wish no cuenta con un depósito donde puedan almacenar su mercancía. Además, Wish ofrece productos “gratis”, muchos de ellos no cuestan nada en su fabricación y te cobran 20 dólares de envío. Y uno feliz porque compró algo “gratis”, cuando tan solo se tata de otra trampa.
¿Por qué Wish es tan ridículo?
Todo se debe al algoritmo de Facebook cambiado el año 2015. Este año se transformó en el inicio del fin para la red social, que ha vista un declive en su uso dentro del público joven (el mismo que lo abrazó con total fidelidad el año 2008).
Wish es la marca que más ha invertido en Facebook, con 100 millones de dólares. El problema es que Wish cuenta con 170 millones de productos, apareciendo cada semana 90 millones de ellos en el feed de los usuarios de Facebook.
Wish vende tres millones de productos al día, y muchos de ellos son cosas realmente útiles. Sin embargo, el algoritmo de Facebook nos muestra lo que clikean nuestros amigos y conocidos, muchas veces motivados por la curiosidad. Por esta razón, vemos decenas y quizás has cientos de anuncios sobre productos que no necesitamos pero que nos dan risa y vemos por curiosidad.
Bajo esta línea, la marca ha sido inteligente: sabe aprovecharse de su propia publicidad como una compañía que comercializa productos hilarantes. Wish llegó para quedarse, y si necesitas un cepillo de dientes con linterna y tienes el tiempo suficiente de esperar 60 días, entonces deberías (quizás) darle una oportunidad.
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