La Prohibida se presenta hoy en la fiesta Toby. Ojo ahí.
La Prohibida es una cantante travesti que aterrizó en el planeta el 2001 y con el furor de MySpace lanzó una carrera en el mundo del entretenimiento.
En Chile, se ha presentado en cada etapa de su carrera. En 2006 vino después del furor que en 2005 causó Flash, su primer gran éxito. Invitada por el canal Vía X, para participar junto a Natalia Valdevenito y Jenny Cavallo en Cabra Chica Gritona.
En este capítulo, y como otra de las invitadas al show, La Prohibida cantó Flash y conversó con las actrices.
Hoy la historia es diferente. Ya más acostumbrada a dar entrevistas, a los flashes y la estructura de lo que significa viajar de un lado a otro cantando, bailando y respondiendo todo tipo de preguntas; nos encontramos a conversar.
Existe toda una halo construido alrededor de su imagen. Mitos y verdades, la convierten en una leyenda andante. Lo cierto es que nunca ha tenido miedo de responder preguntas. Es transparente y directa, sin rodeos, atenta a las jugadas y siempre pendiente de lo que está pasando cerca de ella.
También sabe qué pasa en Chile. Se informa por la prensa sobre los acontecimientos más importantes. Sabe que se aprobó el Acuerdo de Unión Civil y tiene sus ojos surfeando en Internet, pero cuidadosamente.
No es adicta a Internet, pero trabaja desde ahí. Sube, dice, una vez a la semana una que otra foto a Instagram, es concisa sobre lo que sale en su Facebook, no le presta tanta atención como debería o como quisiera. Prefiere la naturaleza, por esta razón Pocahontas es su princesa Disney favorita, cuenta.
Fue por Internet, las redes y sus cercanos que de a poco fue entrando en las lógicas virtuales. Dijo “no más” cuando iban cayendo las respuestas a sus peticiones para poder producir más contenido, más música, arte. Por lo mismo decidió soltar todo y trabajar en su propio sello, ser su propia jefa y hacer todo lo que ella quisiera, sin tener que soportar argumentos que aquejaran su visión.
Con un crowdfunding reunió todo el dinero que necesitaba para este último disco que viene a presentar a Chile este viernes 15 de diciembre en Fiestas Toby. En su disquera sólo se produce ella, y así “funciona bien”.
“Saco mis propias cosas. He estado en dos disqueras y veo que hacen lo mismo que puedo hacer yo. Si lo puedo hacer yo ¿Por qué entonces lo hace otra persona y beneficiarse con lo que hago con el 90% de mi trabajo? Estamos en una era en la que te puedes promocionar, vender y hasta recaudar fondos para tu trabajo. El contacto con el público está ahí. Ya no necesitas a una disquera que te mande a la televisión, lo subes a Internet y la gente que te quiere ver, te ve”.
Llegué a Club Femme para nuestra entrevista. No la encontraba por ninguna parte. Me atendió el productor de la fiesta y me comentó que la estaban entrevistando para un vlog, en YouTube. Una de las preguntas era “¿Qué es para ti la lengua en el hoyo?”. Inmediatamente pensé en los temas que tenía preparados yo. No podía perder el tiempo preguntando por chilenismos, así que fui directo a lo que me interesaba: su opinión.
Pero, no una opinión sobre cualquier cosa, no una opinión liviana. Quería conocer realmente cómo es que funciona la cabeza de una travesti española que se consolidó en la música, que extendió su camino por el cine y que ha colaborado con más de 25 artistas y que por algún motivo en Chile la han entrevistado en diferentes medios e incluso compartió escenerio con la fallecida artista nacional Hija de Perra, a quién envió sus condolencias el día de su muerte.
Su relación con Chile es muy estrecha. Es parte de su estilo mezclarse con cada cultura que visita. Acá tiene muchos amigos, lo primero que hizo apenas pisó suelo chileno fue ir a visitar a un amigo, se quedó allí y luego reuniones con la prensa.
No ha notado ningún cambio desde la última vez que vino “los cambios hay que vivirlos en el país para notarlos, pero si sé que en este último Gobierno ha avanzado en materia de género y sexualidad, y este boom travesti que está pasando a mí me encanta”.
Las travestis, la música, todo goza de buena salud para la artista. “La música está en su mejor momento, la industria musical está cada vez peor, gracias al poder compartirlo en las redes”.
En la industria musical, dice, hay directivos que creen saber seleccionar correctamente lo que tiene que estar pasando. “Hoy en día que seas trans o que seas lo que seas tampoco es algo tan importante, porque ya existen respuestas inmediatas del público. No creo que haya mucha transfobia ni homofobia, la hay en el planeta, pero concretamente y musicalmente no”.
¿Te has sentido discriminada?
“A veces un poquito, pero tampoco es discriminación, si a un programador de un concierto no le gusta lo que hago a lo mejor no le gusta porque no le gusta, no me puedo sentir discriminada por todo. El arte siempre ha sido un mundo con poca discriminación, por suerte”.
Me dice que esta llegada a Chile la titularia como La Colina Luminosa, una de sus canciones, que habla de la distancia, del pop, del amor, de aquello que está tan lejos y que uno puede desear, de aquellos cuerpos marginados, extraños, que no existen si no es en el gusto de aquellos otros marginados.
Aquí le gustaría trabajar en Vía X, es el lugar donde ha participado constantemente. “Es uno de los medios que me ha tratado con más cariño y respeto, me gusta mucho la televisión que hace. Ellos no me vieron como travesti ni transexual, eran unos directores de contenido que creyeron que mi propuesta era interesante, en el 2006”.
No cree en el género y tampoco en sus roles. No los niega, los acepta. Entiende a las mujeres que quieren casarse y tener hijos, entiende al padre de familia que decide ser amo de casa y quedarse en casa cuidando los hijos, “siempre que lo hagan desde la libertad”, afirma.
“A veces la represión es buena para crear. La represión crea dioses y monstruos, pero no es necesaria para la felicidad”, me responde cuando le pregunto sobre cómo estos roles configuran la creación artística. “Tenemos mujeres muy sexys, muy poco sexys, otras a las que les interesa más el contenido que la forma, hay de todo”.
También aclara que hay que votar informado, y que “hombre, hay que votar por todos menos por Piñera. Yo soy más de izquierdas que el grifo del agua caliente, para votar hay que informarse muy bien, hay que leer mucho, conocer al candidato y el pasado y el presente y lo que ha hecho y lo que ha prometido y lo que no ha cumplido”.
“Estoy muy contraria a la cultura de los titulares, no se puede uno basar en los titulares para dar opiniones”, comenta. En España están viviendo un movimiento independentista y La Prohibida está a favor de la independencia de lo que sea, pero con buenos argumentos. “Hay tantos matices, tantas vueltas, muchos clavos sueltos. Al día de hoy sigo tratando de entender a los independentistas, pero no lo logro. Reivindico la cultura y la identidad Catalana, como reivindico la Murciana, y las otras. Necesito los argumentos válidos y los que me dan no son válidos, hay muchos falsos y otros inventados, y entiendo mucho menos el Gobierno está haciendo. Por los dos lados están haciendo las cosas mal”.
¿Cuánto falta para que una travesti sea presidenta?
No lo sé, porque si una travesti se dedica al espectáculo no se puede dedicar a la política.
¿Por qué?
Porque es una chorrada. Yo no me voy a travestir para ir al congreso, una hora de maquillaje y un vestuario con joyas, la política es cabeza. No vas a actuar al congreso, son campos muy diferentes. En los dos se disfrazan, es verdad. Quizá los políticos se disfrazan más y se maquillan más que una travesti, pero es muy diferente. Si me presentara con un cargo político no sería con esta imagen.