Lemmy Kilmister el día de ayer se convirtió en Leyenda y será recordado (al menos) hasta que tus bisnietos ya estén muertos.
Probablemente no eres un fan del rock and roll, pero en más de una oportunidad habrás escuchado o visto el nombre Motörhead.
Lemmy fue su vocalista y hasta el día de ayer era el único miembro original desde que se fundo la banda en 1975 en los grises parajes de Inglaterra.
A él se atribuye la introducción de sonidos punk en el heavy metal, abriendo camino para toda una nueva generación de thrash metal y speed metal.
Fuera del escenario, se ganó una reputación de ávido consumidor de drogas y alcohol y su vida sexual era considerada tan frenética como su música.
“Todavía estamos aquí porque debimos haber muerto hace mucho tiempo pero no lo hicimos”
El primer nombre de su grupo (donde el fue el líder) fue Bastardo, pero alguien le sugirió que con esa denominación sería difícil que fuera invitado a algún programa de televisión.
Los principios de la banda fueron tan poco prometedores que las casas de música no querían grabar sus canciones y la banda practicaba en un depósito de muebles abandonado. Tras años el rubro y demostrar que fueron la banda mas ruidosa de la escena inglesa, hoy poseen más de 22 discos y un Grammy al hombro.
“Música muy básica, ruidosa, rápida, urbana, estridente, arrogante, paranoica, rock & roll veloz, tan fuerte que si nos mudáramos al lado de tu casa, tu césped moriría”
Además de la música, Lemmy era coleccionista de artículos bélicos… siendo sus preferidos los accesorios e indumentaria Nazi. En Alemania en más de alguna oportunidad se le acusó de ser uno de ellos, pero el mismo se ríe de la situación diciendo que el sería el peor de los nazis: