Desde hace un par de semanas el hongo negro y la mucormicosis han sido las portadas de distintos medios nacionales y mundiales. Noticias que hablan de extirpación de ojos, hasta de muertes por este padecimiento, han llenado las redes sociales con la aparición de casos de esta enfermedad relacionados a pacientes con Covid-19. Pero, ¿es esta otra potencial pandemia? ¿Hace cuánto existe esta condición y qué tiene que ver con el coronavirus? Un experto nos responde estas y otras interrogantes.
Cuando te caes en la tierra y te haces una herida, o cuando te comes un pan mohoso, podrías estar ingiriendo moho mucor, mejor conocido como hongo negro. Pero no te alarmes porque es uno de los tantos microorganismos que el cuerpo humano acostumbra a combatir. Es poco probable que, si tienes un sistema inmune estable, pase a escenarios graves.
Para entender cómo afecta la infección que producen estos hongos, llamada mucormicosis, hay que tener presente la estructura de la cabeza humana. El académico de la Escuela de Medicina de la Universidad Mayor, Miguel Acevedo, nos explica. “Los huesos de la cara no son macizos como un ladrillo fiscal, están llenos de hoyitos por dentro, como una marraqueta. Cuando este hongo se compromete con esta zona puede producir una mucormicosis rinosinusal, que es bastante grave, muchas veces mortal porque se desarrolla al interior de nuestra cabeza y puede comprometer la base de los ojos, el cerebro, la circulación cerebral”, comenta.
Pero es enfático al añadir que es poco frecuente y muy raro que llegue a este nivel. También agrega que lo que está pasando mediáticamente con el hongo negro es algo típico de esta época: “hay cosas que son antiguas y que de repente se ponen de moda y parecen ser la gran cosa”.
¿Qué tiene que ver esto con el covid-19?
“¿Quiénes son los pacientes covid más graves? Los obesos, los diabéticos y los inmunodeprimidos. ¿Qué tienen en común los inmunodeprimidos con los diabéticos? Que también tienen sus linfocitos, sus células blancas a cargo de las defensas, están medias lentas, por lo que podría ser más fácil infectarse. Una persona con inmunidad común y corriente no le pasa nada cuando se enfrenta al hongo”
¿Cómo este hongo se puede colar hasta un centro de salud?
“Porque habitualmente una persona que está en la UCI está en muy malas condiciones generales de salud, lo que incluye una dosis abundante de medicamentos y otro daños, como el deterioro de la alimentación. Un paciente en la UCI usualmente está desnutrido y le pasan cosas por el suero. Todo eso hace que esté en una condición de menor capacidad de sentido y tiene disminuidas sus defensas naturales porque la estamos tapando con corticoides o, por ejemplo, porque tenía una diabetes descontrolada que tiene ya incidencia en disminuir una buena respuesta inmunitaria. No es un tema de rareza, sino de qué tan preparado está mi cuerpo hoy para abordar esa situación.
¿Cómo se contagia frecuentemente?
“No de persona a persona. Alguien con mucormicosis no me va a contagiar mucormicosis. Lo puedo adquirir si me contamino una herida con tierra en la cual están los hongos presentes y el trauma local produce mayor daño, lo que hace más fácil que se produzca una reacción inflamatoria y tener más agentes nocivos en el organismo por esa puerta de entrada. No me voy a contagiar si entro a una pieza donde hay un paciente con esta enfermedad, de hecho lo más probable es que no me contagie si tengo mis defensas buenas. No es como el covid”
¿Qué debo hacer para prevenirlo?
“Usar protección buconasal: protegerse la boca y la nariz. Además de lavarse las manos antes de comer y tener una buena higiene respiratoria: cuidar mi respiración de agentes externos que puedan entrar. Hay que tomar precauciones normales. Esta enfermedad es rara en todo el mundo, excepto en India. ¿En Chile hay? Sí. ¿Ha habido años atrás? Sí, pero hay miles de otras enfermedades que podrían aparecer en relación a pacientes inmunocomprometidos, en pacientes graves, con leucemia o con tratamiento al cáncer”