Para este experimental filme pseudo-biográfico del pintor se usaron 60 mil cuadros de óleo.
Los libros de historia-del-arte aseguran que Vincent se suicidó solo en Paris. Pero Hugh Welchman, el director de la película, armó una historia distinta. Una que se desarrolla en torno a la posibilidad de que su muerte fuera un homicidio.
Para el desarrollo artístico, sus creadores se hicieron la siguiente pregunta: ¿Cómo seria un film hecho por Van Gogh?
El resultado es una película animada en la que se ocuparon 60 mil cuadros de óleo. Todos pintados a mano y animados por 100 artistas. Mucho de ellos era animadores que tuvieron que aprender a pintar y pintores que tuvieron que aprender a animar sus obras.
A pesar de que este proceso puede sonar carísimo, la verdad es que los costos de este tipo de producción cuestan la mitad de lo que cuestan las películas con efectos especiales tipo “Avengers”. Así lo aseguraron desde Trademark Films, la productora detrás del proyecto.
Loving Vincent estará disponible para el próximo año pero desde ya voy a comprarme un trip para hacer la experiencia 9D.
Puedes ver el trailer acá abajo.