Marco y Esteban Grimalt han juntado entre ambos más de 14 medallas en su disciplina. El voleibol playa es un deporte que profesionalizaron desde pequeños y luego de un largo camino entre olimpiadas y competencias por todo el mundo, nos sentamos a conversar sobre perseverancia, éxito, estrés y adaptación al cambio. Esto fue lo que nos contaron.
Perseverancia y voleibol playa
Esteban: En el fondo la perseverancia es estar enfocado en un objetivo y hacer todo con la intención de alcanzarlo. Nosotros entrenamos de lunes a viernes, y cuando tenemos periodo de competencia de lunes a viernes y competimos los fines de semana, no hay días de descanso, siempre con el objetivo bien claro.
La única manera de conseguir esos objetivos, sobre todo en el deporte, es con perseverancia porque hay que entrenar y entrenar todos los días, no dejar de entrenar, cada día que no entrenamos o cada entrenamiento que no hacemos, es una ventaja para nuestros rivales en los torneos, así que tenemos que ser perseverantes en cuanto a eso, y dar siempre el 100% para poder ir mejorando.
“Nosotros entrenamos de lunes a viernes, y cuando tenemos periodo de competencia de lunes a viernes y competimos los fines de semana, no hay días de descanso”.
Marco: Es no bajar nunca los brazos. sobre todo en la realidad chilena. Cuando uno dice que es deportista todo el mundo te mira raro y te pregunta “realmente ¿qué es lo que haces?”. Ser deportista es nuestra profesión, nos dedicamos diez años al alto rendimiento. Todo parte con apoyo familiar y a medida que vamos consiguiendo los resultados van llegando los apoyos del Gobierno y de la empresa privada, pero sin duda la perseverancia nos ha llevado a cosechar los frutos que tenemos hoy en día y a perseguir los sueños que tenemos.
Estrés
Esteban: En un comienzo sentíamos una ansiedad mucho más grande en cada uno de los torneos en los que participábamos. Cuando la ansiedad no está bien enfocada te juega en contra y yo creo que lo mejor para llegar cada vez mejor preparado y responder mejor ante la presión es la experiencia.
Llevamos diez años en el alto rendimiento, tenemos una experiencia mucho mayor en comparación quizá a lo que se diga en Chile en cuanto a nuestro deporte. Cada año hemos ido mejorando esos momentos de presión, en un principio nos desesperábamos más y eso te lleva a cometer errores, pero es totalmente normal seguir sintiendo ansiedad.
En nuestros primeros Juegos Olímpicos, el año 2016, sentíamos una ansiedad súper grande, ese era nuestro sueño, es lo más alto que se puede llegar en el voleibol playa. Al conseguirlo lo disfrutamos y lo vivimos la máximo, pero sentimos una ansiedad y una presión que quizá nos pasó la cuenta en los partidos.
“En el voleibol playa tienes que tomar decisiones en décimas de segundo, tienes que reaccionar muy rápido y para eso tienes que tener la cabeza muy despejada”.
Ahora que ya tenemos esa experiencia y que ya lo vivimos estamos mejor preparados para buscar una clasificación olímpica y, al estar ahí nuevamente, hacer las cosas mucho mejor.
Marco: En el voleibol playa tienes que tomar decisiones en décimas de segundo, tienes que reaccionar muy rápido y para eso tienes que tener la cabeza muy despejada. Hay muchos factores que influyen en las decisiones: climáticos, externos al deporte, alimentación, cómo estás en ese día en especial, preparación física, descanso, todo eso hay que trabajarlo de la mejor forma para que no te influyan en la toma de decisiones.
Éxito
Esteban: El éxito es conseguir las cosas que uno se planea, cumplir con los objetivos que nos planteamos a principio de cada ciclo, y mejorar. En el voleibol playa y en el deporte uno es exitoso cuando uno se siente exitoso, cuando es cada día mejor que el día anterior, cuando avanza, cuando consigue lo que quiere, cuando se supera a uno mismo.
Marco: Es un estado de realización, uno en el fondo magnifica el éxito cuando consigue los resultados, los sueños que se ha propuesto en base a trabajo, esfuerzo, sacrifico, perseverancia, ahí uno puede decir que tiene éxito… después de llegar a cumplir algo.
Cambio constante
Esteban: Es algo bastante difícil, pero ya llevamos bastante tiempo haciéndolo. Desde 2013 que comenzamos a viajar constantemente y a trabajar en el circuito mundial, estamos tres o cuatro meses fuera en competencia, y uno o dos meses concentrados preparándonos para la competencia. Es algo súper sacrificado porque se dejan muchas cosas de lado, si uno lo ve desde afuera uno piensa que es increíble estar viajando todo el año, no te voy a negar que es algo bonito, pero es muy distinto a hacerlo de vacaciones que hacerlo trabajando.
Estar lejos de la familia, seres queridos, pololas, gente con la que uno se relaciona en Chile, eso es lo más difícil, pero el apoyo de esas mismas personas y el orgullo que sienten cuando conseguimos nuestros objetivos son la retroalmientación que necesitamos
Marco: Es un proceso en el que hemos ido adaptándonos a tener que viajar tanto, hoy pasamos cerca de cinco meses fuera de Chile. Tener que dejar los estudios de lado, aplazar la carrera. Al principio de este proceso viajamos sólo los veranos y hoy viajamos cinco o seis meses fuera de Chile y el apoyo familiar nos hace sentir que lo estamos haciendo bien.
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