foto: Valentina Campos

Por Hernán Melgarejo

Manuel Granic tiene 26 años pero por su trayectoria musical pareciera que tiene muchos más. Su nombre artístico es Namuel y en 2011 pasó de hacer maquetas en Fruity Loops y tocar en proyectos under a ser tecladista de Javiera Mena.

Desde entonces su carrera musical no ha parado. Ha acompañado desde las teclas a Adrianigual, Entrópica, Francisco Victoria y Sofía Oport, entre otros músicos. Como Namuel ha lanzado 2 EPs (Noche Polar en 2013 y Folclórico en 2015) y un mixtape (Payasos, en 2018), y varios singles. Uno de ellos, “Maldita Ingenuidad” fue número uno en descargas en Itunes Chile en 2016.

Con esos pergaminos uno supondría que Namuel es una figura híper reconocida dentro del pop nacional. Pero no es así. Pese a su trayectoria y logros, su nombre resuena más en el underground y en el círculo del activismo gay que en el mainstream.

Anorexia
foto: Nicolás Ferreti/ Nicolás Zamorano

Eso no quita que su novedosa propuesta visual y su música, cuyo sonido Namuel define como “”fluctuante” y que ha oscilado entre el electropop y las baladas oscuras, siga llamando la atención cada vez que se libera.

Este 2 de mayo Namuel publicó su último single, Cascabel, cuyo trasfondo lo convierte en el tema más autobiográfico de su carrera. Trata sobre el trastorno alimenticio que sufre hace más de una década que lo hace ser adicto a los laxantes y a tener ayunos intermitentes. El año pasado tuvo una crisis que lo llevó a una clínica psiquiátrica durante varios meses y a estar con riesgo de morir de un infarto al corazón y de ser dializado a los 26 años.

“Como un duende enterrado dentro de un agujero tengo la triste certeza de que de esto yo me muero. Piernas de araña. Voz de cascabel. ¿Dentro de todo el mundo por qué yo?”, canta Namuel en Cascabel con una voz frágil y quebrada estilizada con efecto de autotune y vocoder.

Namuel habló con Pousta sobre esta nueva canción y sobre la pesadilla que vivió el año pasado por culpa de la anorexia.

foto: Valentina Campos

¿Cómo definirías Cascabel?

Como una canción autobiográfica que quise sacar en cierta forma para desahogarme a través de la música y para ser más honesto con lo que hago. Porque sentía que estaba haciendo música un poco falsa. Como que no era yo quien cantaba. O sea era yo pero no eran mis experiencias. Y tuve un año súper complicado y estaba cantando sobre bailar y retomar el poder y canciones de amor. Y mi vida no se trataba de eso en ese entonces.

¿Qué fue lo que te pasó el año pasado que quisiste plasmar en la canción

Obviamente la canción se trata de los desórdenes alimenticios. Y no es algo de un año, es algo que se arrastra desde hace 11 o 12 años. Pero que explotó el año pasado cuando lo asumí y busqué ayuda profesional y ahí me dieron un diagnóstico. Terminé en una clínica psiquiátrica por tres meses, aunque no seguidos. Fueron cuatro hospitalizaciones y obviamente entre esos meses mi vida giraba en torno a terapias, a estar todo el día muy empastillado. Dejé de lado mis estudios, mi carrera, mi vida social, perdí toda mi vida social… Y en ese momento tampoco buscaba sanarme, fue una imposición médica. Busqué ayuda por otra cosa, pero me agarraron por esto y yo no buscaba ayuda por eso. Sabía que lo tenía pero no quería ni asumirlo ni curarlo. Por eso digo en la canción “sé que de esto me muero” porque ya formaba parte de mi identidad.

foto: Valentina Campos

¿Dices que el trastorno estaba tan dentro de ti que no lo identificabas como un problema?

O sea sabía que era un problema. Pero cuando lo tienes tan dentro de ti tienes muchos pensamientos intrusivos y te vuelves adicto a todo lo que conlleva. Mi problema principal era una adicción a laxantes y diuréticos y ayunos intermitentes. Eso me conllevó a tener problemas cardiacos, y los médicos me dijeron que si seguía así tenía riesgo de diálisis y de tener un paro al corazón. A los 26 años. Tuve una parálisis intestinal. Sufrí convulsiones una vez por una deshidratación. Tuve mil problemas médicos. Terminé en la clínica un montón de veces y aún así seguía dándole con las pastillas y las dietas extremas.

¿Quiénes te ayudaron?

Definitivamente hubo amigos y amigas que me ayudaron mucho, sobre todo en el sentido que me acompañaron en todo momento. Mi familia también me ayudó. Les costó entender porque nunca han lidiado con el hecho de la salud mental, por una brecha generacional. Pero si dijera que he estado solo en todo esto será muy egoísta de mi parte. Aunque obviamente hay días en los que me siento muy solo. Pro no lo he estado

¿Cómo estás ahora del trastorno?

Es algo que va y viene. Mi última hospitalización fue en marzo, este año. He podido recuperarme en el sentido de que he recuperado el peso y mentalmente quiero mejorarme. Y tengo la mente ocupada en otras cosas. Retomé los estudios, retomé la música.

¿Cascabel juega un rol terapéutico en tu recuperación?

Si, absolutamente.

¿Cómo nace Cascabel?

Fue súper rápida. Nace del aire. Estaba sentado en el piano y nació. No tiene mucha ciencia cómo nace cascabel. Tenía algo que decir y un día pude decirlo.

En la letra te cuestionas “por qué a mi”.

Si, por qué a mi. Porque hay días, hasta hoy, en que mi cabeza está solo enfocada en el desorden alimenticio. Y no puedo funcionar. Por ejemplo, estoy estudiando y no puedo ir a clases, no puedo trabajar, no puedo hacer nada más que estar frente al espejo buscando defectos en mi cuerpo que necesitan ser arreglados según esta mente que distorsiona lo que ve. Por eso digo ¿por qué tengo que pasar por esto? Siendo que, a mi parecer, creo que gran parte de la población no tiene que pasar por esto.

¿Qué le dirías tú a alguien que está pasando por el mismo proceso?

Esa es la idea de sacar esta canción. Porque pude haberlo escrito en mi diario, pero saqué la canción para que alguien que está pasando por algo parecido pudiera darse cuenta que es algo que a cualquiera le puede pasar. Que a mí me pasa, que no está solo. Y que en verdad buscar ayuda es imperativo. Ya sea ayuda profesional o ayuda entre su círculo cercano.

El futuro

¿Cómo definirías la etapa actual de tu carrera?

Ahora estoy produciendo un disco. No sé si un disco, pero un grupo de canciones con un productor llamado Brian Sofía. Y no se mucho cual es el fin. Estamos viendo hacia donde nos lleva. Cascabel es una canción que quise sacar sola. No es parte de otro grupo de canciones

¿De qué se tratan tus nuevas canciones?

Estoy volviendo un poco a lo bailable, porque ya pasé esta época de experimentación y de baladas. Estoy re grabando un par de canciones antiguas, porque a comienzos de mi carrera cuando trabajaba con Ignacio Redard la calidad de audio no era tan profesional. Entonces ahora quiero rescatar ciertas canciones que creo que son importantes en mi catálogo. Y obviamente canciones nuevas. Pero si, hay canciones confesionales, hay canciones que son sátiras de la industria y hay de todo en verdad.

¿Y hay referencias a lo que te pasó?

Sí. Escribí más canciones en ese periodo. Tengo canciones que escribí en ese momento sobre la virtud de la paciencia. Sobre la rabia. Sobre tratar de perdonar y perdonarse. En la misma clínica yo tenía una guitarra y una grabadora y ahí escribí la mitad de las canciones que estoy trabajando en este momento.

¿Por qué crees que no ha explotado tu carrera?

No explota por falta de presupuesto. Hay que tener presupuesto para llegar a más público. Hay que tener manager, publicista, prensa, y yo soy absolutamente independiente. Yo juego todo esos roles en mi carrera. Y no es que esté cómodo, pero es lo que puedo hacer en este momento.

¿Hay algún aprendizaje que puedas sacar en limpio de este último período de tu vida, de lo que te pasó?

Siento que me sigue pasando. Pero he aprendido que solo no puedo. Y que mientras más tiempo se deja estar uno, más difícil es salir del hoyo negro.