Hoy en noticias que no son noticias pero que prometen recordarte lo raro que es el mundo en el que vivimos, tenemos la historia del líder de una banda de narcotraficantes que intentó -sin éxito- huir de prisión disfrazado de su hija. El tipo se tomó la fuga en serio y realizó todo un cosplay de White Chicks, esa película donde dos hombres parodian a las hermanas Hilton mientras trabajan de forma encubierta (y que está en Netflix por si acaso).

Clauvino da Silva, también conocido como “Shorty”, planeó junto a su hija un escape que terminó muy mal. Cuando la chica de 19 años fue a visitarlo, esta intercambió de lugar con su padre. Es decir, ella se quedó en la celda mientras que Da Silva caminaba por el corredor disfrazado con una máscara de silicona y toda la indumentaria necesaria para salir por la puerta de enfrente.

La policía informó que el principal delator del narcotraficante fue su propio nerviosismo, y que fue grabado mientras se quitba la indumentaria en un acto muy, pero muy bizarro. Desde Brasil, han informado que Da Silva fue trasladado a una prisión de máxima seguridad y que se evalúa efectuar cargos a su hija por actuar como cómplice en este intento de fuga.

Las autoridades confirmaron que Clauvino forma (o formaba) parte del Comando Rojo, agrupación responsable de la violencia en las calles de Río de Janeiro.