Las playas de todo el mundo se llenan de basura. Sucede siempre, cada verano las arenas de la orilla del mar terminan llenas de desechos dejados ahí irresponsablemente por los despreocupados veraneantes.

Pero no todo es tan deprimente: Richard Lang y Judith Selby Lang son una pareja de California y durante años se ha dedicado a recolectar toda la porquería plástica que deja la gente en la playa cerca de su casa, y se han dado el trabajo de clasificarla y hacer real arte con ella. Bajo el nombre de One Plastic Beach crean esculturas, instalaciones, fotografías, joyas y accesorios… todo con plástico desperdiciado. Un meticuloso trabajo realmente inspirador, que nos demuestra que cualquier cosa puede ser utilizada como herramienta de expresión para crear arte. Emocionados con los detalles o texturas del plástico, esta pareja pretende crear conciencia del excesivo uso y dependencia que tenemos con este material, que tanto daña ecosistemas naturales como las entretenidas playas de California.