Tuvimos acceso a echarle una miradita a la revista Cosas que sale hoy y la entrevista a Pamela Jiles está tan buena que quisimos compartir con ustedes algunas de sus reflexiones y espectaculares fotos.

La periodista y diputada del Partido Humanista, más conocida como la abuela, dio una entrevista a la revista COSAS donde abordó varios temas de la contingencia y además contestó a la pregunta respecto de si tiene aspiraciones presidenciales.

Acá te dejamos algunas perlas de la entrevista que saldrá este jueves.

Sobre su participación en el FA

“Me siento parte de una gesta poética y política que llevará al Frente Amplio a gobernar el país. Nuestra bancada es potente, bella y alegre, tiene defectos, pero también la pureza y la capacidad necesaria para abrir el camino a los millones de ciudadanos que han estado excluidos del poder. Es muy conmovedor ser la abuela del Frente Amplio, me produce felicidad”.

Patricia Maldonado

“Ella siembra odio y produce dolor a tal extremo que se ha convertido en un corpóreo del odio y del dolor. Cada vez que aparece en televisión vuelve a enfermar a este país. Es necesario que pida perdón a las víctimas que ha ofendido tan gravemente”.

Ultraderecha

“Y cada vez que nos dicen que hay que ‘poner contexto’ al horror, pero que con eso no están justificando el horror, lo que nos están diciendo es que si tuvieran la menor posibilidad volverían a perseguirnos, torturarnos, matarnos y desaparecernos”.

Abuela presidenta

“El Partido Humanista es la segunda fuerza electoral del Frente Amplio –tras RD–, contamos con cartas competitivas, por supuesto que vamos a levantar nuestro candidato o candidata presidencial que concurrirá a una primaria del Frente Amplio en la que será el pueblo el que se pronuncie. Es decir, será mi ejército de nietos el que defina si soy candidata presidencial”.

Ignacio Urrutia (UDI)

“Sentí que el Frente Amplio entró ese día al Congreso, porque hasta entonces no se había notado un cambio, hasta ese momento este individuo había proferido ofensas tan graves como terroristas con aguinaldo y nadie había tenido el valor de pararse de su asiento y confrontarlo. Nadie había interpretado a los excluidos del poder, el dolor que nos infieren una y otra vez sin que podamos defendernos. Lo que hacen es volver a torturarnos… Eso sentí”.

Proyecto Ley de Adopción

Significa la única posibilidad cierta de salvar vidas de niños, niñas y adolescentes. En los primeros seis meses de este año han muerto 77 personas que estaban bajo la responsabilidad del Sename. Y seguirán muriendo porque no hay voluntad política real de cambiar la situación. Es una responsabilidad del Estado, por supuesto, pero la crisis es tan grave, es un verdadero genocidio infantil que exige respuestas inmediatas. Debemos implementar con urgencia un sistema de adopción que amplíe la cantidad de posibles padres adoptivos, que disminuya las barreras y acorte los plazos que dificultan adoptar. Eso garantiza que salvemos al menos mil niños al año. Y eso es lo que estamos haciendo desde el primer artículo de esta ley al amparar el dercho de niñas, niños y adolescente a vivir en el seno de una familia, cualquiera sea su composición. Esa pequeña y simple frase cambiará la situación de miles de pequeños.

Soy Queer

Soy queer porque subvierto todos los roles en mi propia existencia, dado que son construcciones no naturales. Mi género es el de los oprimidos. Soy lesbiana, hombre, mujer, transexual, o lo que sea de manera fluida. Cuestiono la heteronorma en todos mis actos. Me opongo al opresor con mi cuerpo y mi deseo, convencidad de que la revolución será posible solo cuando construyamos nuestra propia identidad de oprimidos, nuestros imaginarios, en oposición a los patrones heteropatriarcales que dieron origen a nuestra esclavitud. Trabajo en esto hace más de cuarenta años, cuando nadie visibilizaba nuestra existencia “rara” en los medios de comunicación ni en el escenario político. Ya entonces me instalé como una queer en los medios, a vista y paciencia de todo el mundo, y me dediqué a hacer política con ese instrumental “raro” hasta hoy.

Mauricio Rojas

Nominar a Mauricio Rojas como Ministro de las Culturas fue como poner a Urrutia de ministro de Derechos Humanos. Se trata de un negacionista peligroso y de un impostor que dice ser ex mirista, aunque no militó ni un segundo en el MIR; dice haber sido exiliado, aunque jamás tuvo prohibido estar en Chile; posa de intelectual, aunque su único pergamino es pertenecer al coro de “yes-man” del insoportable Vargas Llosa.

*Texto original y fotos, revista COSAS (texto: Jonathan Reyes / Foto y posproducción: Noli Provoste/ Producción y styling: Vanina Rosenthal/ Asistente vestuario: Lorena Chillura/ Maquillaje: Tere Irarrázabal para Lancome/ Pelo: Luis Mardones para Kerastase / Zapatos: Aldo.)