Stéphane Ashpool, fundador de Pigalle, creó junto a Nike unas sicodélicas canchas de baloncesto para la comunidad en los suburbios de Paris.

Orgulloso de sus orígenes como buen chico ghetto, Stéphane Ashpool, francés nacido y crecido en el barrio de Pigalle, decidió ocupar el famoso nombre del barrio rojo parisino para su marca de ropa.

Nadie pensaría que años después la marca underground francesa se transformaría en todo un referente al momento de hablar de menswear.

Y no solo es un referente en la moda. Su dueño después de abrir su tercera tienda boutique en Tokio y ganarse el prestigioso premio ANADAM, en 2015 dijo que quería abrir una escuela en su barrio y postularse para alcalde.

Fanático del basketball desde pequeño, Stéphane Ashpool orgulloso define a Pigalle como “el Supreme francés”.

La verdad es que la comparación no se queda chica. Ashpool viene trabajando con Nike desde 2007, cuando gracias a los vecinos del barrio convencieron al municipio de hacer una cancha de básquetbol para la comunidad.

Lebron y el dueño de Pigalle inagurando la cancha.

 

El resultado es una de las canchas de básquetbol más fotografiadas del mundo. Además, tienen un equipo de básquetbol juvenil del barrio auspiciado por Pigalle y Nike. Sin olvidar las colecciones especiales que se venden como pan caliente en mercados japoneses.

Inaugurada junto a Nike, la cancha ha tenido una series de actualizaciones de diseño de la mano del famoso y hypeado estudio francés de diseño Ill Studio, en 2015.


El diseño está inspirado en el trabajo del artista ruso Kasimir Malevich para la segunda coleción de Pigalle basketball, en 2014.

La actualización de 2017 llega otra vez de la mano de Nike, ya que para conmemorar la nueva colección de NikeLab x Pigalle cambiaron los colores primarios por gradientes de azul, rosado y naranjo.

Ashpool pretende que la cancha sea usada durante los Juegos Olímpicos de 2024, que posiblemente podrían disputarse en París o, en el peor de los casos para Francia, en Los Angeles, Estados Unidos.

Por el momento, Ashpool sigue haciendo actos sociales como un agente de cambio, luciendo las ultimas tendencias siempre. Este tipo no puede sonar más parisino.