Suena confuso pero la realidad (y la magia) también lo es.
La instructora Isabel Beltrán y su hermana Ximena Larkin diseñaron una mágica clase que combina la flexibilidad con el uso de varitas. ¿Adónde hay que teletransportarse para asistir? A Austin, Texas.
Las posiciones incluso tienen nombre de las cosas de Hogwarts: la cobra Slytherin y pronunciar Patronus para espantar a los dementores. El evento no solo incluye la práctica espiritual, sino también una degustación de cervezas. En entrevista con Bustle, Ximena explicó que reparó en hacer una celebración relacionada con Harry Potter “porque sus padres murieron la noche de Halloween y pensé que seria interesante hacer algo relacionado con él. Somos mexicanas, por lo que celebramos el Día de los Muertos; no por morbo, sino por celebrar la vida. Soy muy fan de Harry Potter, y creo que haber leído la saga fue algo que cambió lo que pensaba sobre la muerte”.
La clase le rinde culto al mundo que envuelve a Hogwarts a través del uso de las varitas mágicas, y para canalizar a la profesora McGonagall que los estudiantes llevan dentro (esta docente tiene la habilidad de transformarse en gato) y realizar posturas felinas.
Al final de la clase, cada alumno recibe una capa de la invisibilidad (en el mundo muggle: una frazada), mientras Ximena lee lo que le dijo Dumbledore a Harry antes de morir: “No sientas pena de los muertos, sino de los vivos, y sobre todo de aquellos que viven sin amor”.