Un mundo donde una imagen se deforma y se convierte en algo más. Así es como podemos describir el trabajo de Thomas Barbéy.
Imágenes en blanco y negro inspiradas en el mundo surrealista del gran Salvador Dalí.
Lo mejor de todo esto es que estas fotos las tomo Thomas en muchos de sus viajes worldwide. En donde captura lo intrigante de los escenarios pero siempre de una manera artística llevando la vida real al mundo de los sueños, para finalmente unirlos creando su propio mundo.
El mundo de Barbéy (no de Barbie) agarra dos conceptos uniéndolos para crear pura perfección.
Barbéy dice que lo que le permite transformar los sueños en realidad es la inspiración visionaria que solo la tienen las mentes creativas.