Antes de Facebook, antes de Twitter, antes de Instagram ants de Snapchat, antes de todo lo que conoces como redes sociales, la gente solía conocerse por vías de comunicación mucho menos sofisticadas. Fotolog o MySpace principalmente.
Era una época que los eventos de marca estaban reservados para gente de apellido elegante, gays y chicas con problemas alimenticios. Los actuales trendsetters estaban recién envasados y básicamente lo único interesante que ocurría realmente en Santiago, era lo que pasaba con “la escena”.
La escena en verdad no era solo una. Digamos que estaba la gente más a fin a al punk, pop punk (al que le llamaban erróneamente emo), al post hardcore (erróneamente denominado screamo), al hardcore y más. De allí nacieron conceptos como “el ponceo” (Acuñado por los tipos de No Shame) o los pokemones. De hecho recuerdo como si fuese ayer la primera vez que vi a un pokémon. Ese día el show principal era de una banda que se llamaba D Asfalto y Tierra, y su público, gente nueva y totalmente externa a “la escena” era unos niñitos indescriptibles, con pelo de colores, vestidos todos igual y quienes peyoraativa y pubertamente le decías “pokemones”.
(Estoy seguro que la entonces “Balita Star” fue la que les pegó su “peculiar forma de ezkribiiir”)
El asunto es que hoy en día toda esta gente esta vieja. La universidad y el embarazo le quitó muchísimo tiempo y energía a personas de esta generación, pero afortunadamente, y como todo fenómeno sociológico, ahora viene una especie de contrarespuesta.
Porque claro, esos mismos hijos ya tienen por lo menos 9 años, van al colegio y sus padres tienen tiempo de nuevo para preocuparse de si mismos. Entonces resulta que vuelven a ponerle atención a la música de hoy en día, van al lollapalooza, se deprimen y entonces se ponen nostálgicos.
“Ojalá tocaran en Chile alguna de las bandas que me encantaban cuando chico” piensan mientras derraman una lágrima pensando en Blink-182, Atreyu, Jimmy Eat World, Saosin o cualquiera de las bandas insignes de cada una de las escenas.
Puede que así de literal todo lo que cuento, no sea efectivo, pero los gringos ya lo comenzaron a vivir el año pasado e incluso celebraron una fiesta llamada Taking Back Tuesday, una fiesta pensada para que los mismos quinceañeros que antes iban a tokatas (con K a las 3 de la tarde) vuelvan 10 años después, con panza, barba, tatuajes borrosos y 5 piercings menos.
Viendo la gran foto, este año se viene divertido para todos los nostálgicos. Bandas chilenas como Fakie o Pen están tocando nuevamente. La semana pasada Dallas Green, el padre de Alexisonfire tocó en Chile (En un show de Fauna, algo totalmente inimaginable hasta ahora) y le hizo cariño hasta la fibra más profunda de cada uno de los asistentes. Ayer confirmamos el show de Circa Survive en Chile, una banda que a la cabeza de Anthony Green no solo ha generado un repertorio musical tan bello como potente, sino que además, gracias a la figura de Anthony ha creado un culto alrededor suyo.
Yo por mi parte no puedo más de emoción, sobre todo considerando que veré a amigos que en verdad ya no tengo ni idea cómo ubicar y no veo hace casi un siglo, y ver a todos y todas tus amigos de la infancia reunidos y coreando Act Appalled de seguro será mágico. Mientras tanto lo único que queda es ir marcando los días hasta que llegue el anhelado 9 de mayo y revisar Alternative Press en lugar de Pitchfork.
Sábado 9 y domingo 10 de mayo de 2015
Club Hípico
- Valor de las entradas (sin cargo por servicio):
Pase por 2 días – Primera preventa limitada – $8.000 (últimos 200 tickets disponibles)
Pase por 2 días – Entrada general – $10.000 (disponible al término de la primera preventa) - Venta de tickets diarios se iniciará al agotarse la primera preventa de pase por los dos días. Niños hasta 12 años entran gratis.
- Entradas a la venta a través del sistema Ticketek
https://www.youtube.com/watch?v=I9UkfZ58LmY
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