“¿Qué pasaría si existiera un servicio de transporte que te garantizara que ninguno de sus conductores sean unos babosos porque ninguno de esos conductores es hombre?” se preguntó un día Todd en BoJack Horseman. En Chile lo escucharon y lo hicieron real.
Como la fanática férrea que soy de BoJack Horseman, mi caballo antropomórfico favorito de la televisión, fue imposible que no me resonara el momento en que Todd le presenta un pitch a Mr. Peanutbutter, algo así como el socio con dinero, sobre una idea de negocios: “¿Qué pasaría si existiera un servicio de transporte que te garantizara que ninguno de sus conductores sean unos babosos porque ninguno de esos conductores es hombre?”.
Así nació Cabracadabra, el sistema de transporte para mujeres conducido por mujeres en aplicación, a lo Uber, que estos personajes de ficción crearon.
En una movida muy simpsoniana, haciendo clara referencia a la capacidad que tienen Los Simpson de adelantarse a la realidad tal como lo ha hecho la ciencia ficción por su lado, BoJack Horseman siempre con la parodia en el ADN del show, se adelantó a nuestro tiempo.
Hoy Cabracadabra es una realidad y más encima en Chile.
En la vida real se llama She Drives Us y comenzará su marcha blanca a finales de octubre en algunas comunas de Santiago, mientras esperan que a fines de noviembre la aplicación esté completamente operativa.
Conversamos con el presidente de la compañía Esteban Torres para saber más sobre la primera aplicación exclusivamente para mujeres que quieran ser transportadas por otras mujeres:
¿Cómo nació la idea de She Drives Us?
En diversas conversaciones sostenidas con amigas y familiares encontramos que existía un denominador común cuando hablabamos de Uber, Cabify o Easy Taxi, lo díficil que era trasladarse en la noche sola y como mujer en distintos puntos. Siempre estaba el temor de subirse a un auto y sufrir algún acoso por parte del conductor. Ante esto, nos pusimos a buscar algunos datos a nivel nacional e internacional y nos encontramos con que en varias encuestas, entre un 65% hasta 75% de las mujeres habían sufrido alguna especie de acoso, ya sea desde un piropo hasta alguna tocación; esto significa que 3 de cada 4 mujeres sufre acoso sexual. Entonces, se entiende que responde a una necesidad del público femenino. Vimos, además, que en otros países como Argentina, se creó un modelo similar llamado She Taxi.
¿Cómo están intentando hacer de She Drives Us una aplicación legal, para no tener los problemas de de Uber o Cabify?
Hoy en día existe un vacío legal en relación a la inscripción de vehículos en el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones (MTT), donde los vehículos particulares no pueden ser inscritos, ya que sólo furgones pueden inscribirse. El caso de Cabify es uno de los más autoregulados que hemos encontrado y nosotros apuntamos a esa misma dirección. Solicitamos a todas nuestras conductoras que tengan inicio de actividades como punto de inicio y esperamos que en el corto plazo puedan obtener licencias tipo A2, ya que serán parte de nuestros requisitos mínimos. Esperando salga la ley, para ir adaptando también los vehículos.
¿Cuántas conductoras y pasajeras tienen inscritas?
Hasta la fecha llevamos 2.500 inscritas, entre conductoras y pasajeras.
¿Qué pasa si una mujer va con un acompañante hombre? ¿Y en la caso de ser mujer ese acompañante cambia algo el panorama?
Si una acompañante va con un hombre, puede tomar el servicio siempre y cuando cumpla con dos requisitos: que se suban y bajen en el mismo punto. Y que la conductora acepte el viaje.
Ustedes van a certificar con rut que la pasajera sea mujer, ¿qué pasa con las personas trans (transgénero, transexuales) que no necesariamente hayan hecho un cambio legal de su género y se sienten incómodas tomando otros servicios?
Nosotros solicitamos el carnet de identidad al momento de la inscripción por dos motivos. 1) para verificar que su sexo sea femenino. Si una persona trans realiza su modificación, y por ende su carnet de identidad dice Femenino, entonces puede ser parte de nuestro servicio; y 2) para tener la información de las conductoras y pasajeras por motivos de seguridad.