Catt Gallinger de 24 años realizó un llamado a través de sus redes sociales para que otras personas no se dejen persuadir por esta peligrosa modificación corporal.
“El artista, mi ex novio, me presionó toda la noche para realizar el procedimiento” contó Gallinger a Vice desde Ottawa afirmando que su pareja tenía experiencia en el rubro de los tatuajes oculares.
“Si bien llevábamos juntos un mes nos conocíamos hace años; sentía que me entregaba a las manos de alguien que sabía lo que hacía. Pero me equivoqué” agregó.
Según han reportado diferentes medios alrededor del mundo como Buzzfeed y The Huffington Post, la modelo comenzó a sentir que algo andaba mal desde el primer minuto en que su ojo fue inyectado con tinta púrpura. Su testimonio asegura que Eric Brown –su novio- habría usado una aguja muy grande además de tinta pura en lugar de una diluida especial para este tipo de tatuajes.
Y si bien acudió a los servicios de emergencia de forma inmediata, los doctores la enviaron de vuelta a su casa por no saber cómo afrontar la complejidad de la lesión. Semanas después y luego de ver que los síntomas no mejoraban pese a tomar precauciones, acudió a un nuevo especialista que quedó horrorizado luego de ver el daño permanente causado en su ojo.
El caso se viralizó tanto que la revista Popular Science publicó un artículo completo criticando de forma irónica a Gallinger.
“Los tatuadores profesionales no están entrenados para poner agujas en los ojos; no hay certificación ni escuela para ello. Por favor, si estás considerando tener un tatuaje ocular, solo ve a Google, escribe tatuaje ocular sale mal y ve si tu estómago puede con los resultados” dice el artículo.
Gallinger ha recibido críticas por publicar la evolución de su ojo día a día a través de Facebook siendo acusada de querer lucrar con su desgracia. La modelo respondió:
“Para todos aquellos que me acusan de hacer dinero con el asunto, les aseguro que no es verdad. Estoy pagando por mis medicinas y otros servicios médicos. No he recibido una sola moneda de parte de nadie ni tampoco de alguna entrevista o artículo. Tampoco he iniciado una beneficencia aunque muchos lo han sugerido…honestamente, que alguien piense que quise esto para ser famosa es simplemente ridículo. Hago esto para advertir a otros jóvenes…”
La modelo también se refirió a la prensa canadiense sobre cómo un error afectó también su salud mental. Su novio y responsable del asunto habló con la prensa culpando a la modelo por no tomar medidas luego de realizar el tatuaje como usar gotas y analgésicos.
“Hay días en los que siento que no puedo más con el asunto” señaló la joven a la prensa de Ottawa mientras espera una cirugía que pueda revertir los efectos de un procedimiento estético riesgoso no recomendado bajo ninguna circunstancia.