Este emprendimiento es un palmetazo al racismo persistente en nuestro país entregándole oportunidades laborales a cientos de inmigrantes que llegan día a día a Santiago

 

 

Las noticias falsas relacionadas a inmigración en Chile fueron compartidas más de un millón de veces en redes sociales. Muchos de los reportes publicados por medios de dudosa reputación basados en supuestos lograron proliferar de tal manera que la ficción ha superado las cifras reales sobre quienes han llegado a nuestro país en busca de mejores oportunidades.

Las principales noticias que han circulado durante la primera mitad del 2018 se dividen en 4 aristas que derivaron en creencias equívocas: se publicó, por ejemplo, que el gobierno de Michelle Bachelet recibía dinero directamente desde la ONU por cada inmigrante haitiano que llegó a nuestro país. También se dijo que muchos niños chilenos en edad prescolar no pudieron acceder a instituciones públicas debido a que se privilegió el ingreso de infantes de otras nacionalidades. Como si fuera poco, otras de las noticias replicadas tienen que ver con las cifras desproporcionadas de inmigrantes que llegaron supuestamente al país durante el 2017 -se dijo que más de 700 mil haitianos llegaron a Chile cuando en realidad la cifra es mucho menor-.

Lo anterior ha generado un clima de xenofobia en cierto sector de la población que hace mucho ruido en Twitter:

Sin embargo, las cifras arrojan que solo un 4% de la población chilena está compuesta por inmigrantes y los estudios publicados por el Centro Latinoamericano de la Universidad Católica -basándose en investigaciones reales a diferencia de los anteriormente dichas- aseguran que los efectos de la inmigración en nuestro país son positivos.

Después de todo y según señalan los encargados del informe, la movilidad del empleo entre países permite contribuir al crecimiento económico de las naciones.

Pero las políticas mal diseñadas pueden generar una composición negativa llevando a la informalidad laboral y facilitar la existencia de personas que estén dispuestas a trabajar horas extras sin remuneraciones y ser víctimas de diferentes tipos de abusos.

De esta forma, para hacer el proceso de inmigración más llevadero y al mismo tiempo evitar los abusos que puedan cometer ciertos empleadores inescrupulosos, nació Trabaja Global.

¿Cómo funciona este emprendimiento?

El servicio de este emprendimiento consiste en simplificar a las empresas el proceso de selección y contratación de extranjeros. Para esto, Trabajo Global valida los antecedentes académicos y laborales de los candidatos en su país de origen, y luego los acompaña en la tramitación de visas y permisos para que puedan desarrollarse normalmente en su nuevo trabajo.

Poco a poco, la iniciativa busca que no se pasen a llevar los derechos de los inmigrantes recién llegados, que muchas veces se han visto obligados a trabajar en áreas distintas a sus profesiones u oficios debido a la lentitud de la burocracia y el desconocimiento de la tramitación de los papales necesarios en nuestro país.

Pero los organizadores también tuvieron que enfrentarse a otro obstáculo: el de la barrera lingüística.

“En un principio fue complicado traspasar la barrera idiomática, pero la solución fue hacer alianzas con fundaciones específicas que nos ayudaron en el proceso” sostiene Andrés Khamis, cofundador del proyecto junto a Daniel Vives.

Las fundaciones como Buen Samaritano y otras especializadas en enseñar español a diferentes inmigrantes haitianos lograron que el trabajo fluyera de forma retroactiva: muchos voluntarios que en su momento necesitaron aprender español de forma urgente ahora les enseñan el idioma a sus compatriotas recién llegados.

“Estamos ubicados frente a la Oficina de Migraciones para estar en contacto directo con la comunidad. Tenemos alrededor de mil personas inscritas en nuestra base de datos, pero llegamos a las personas a través de visitas presenciales para dar una mano directa a sus necesidades” nos dijo Khamis.

“Más allá de tener a la gente esperando en una base de datos enorme, hacemos uso de las redes sociales y grupos donde existen comunidades específicas. De esta manera hablamos directamente con la gente cuando aparecen oportunidades laborales” agregó.

Las razones que motivaron a Khamis para fundar esta organización tienen que ver con motivos personales. Según nos cuenta, el mismo tiene una vida ligada a la inmigración.

“Soy de una familia palestina. Me di cuenta de que el trabajo es la principal herramienta que uno tiene para insertarse en un nuevo lugar. Las herramientas que se desarrollan al momento de trabajar en un país diferente se pueden potenciar facilitando todo el proceso y lo que ello conlleva”

Finalmente, mientras las noticias falsas reflejan las intenciones xenófobas de individuos que culpan a la inmigración de males inexistentes, existen personas que trabajan de forma silenciosa para dar una mano a los inmigrantes demostrando que sus derechos sí valen y deben ser protegidos. Tomen eso, racistas.

Para conocer más sobre este emprendimiento y su misión, visita su página web y síguelos en Facebook para estar al tanto de las novedades que te puedan permitir ayudar con la causa.