El fotógrafo londinense Elliot Wilcox estuvo presente en el último partido de fútbol que se realizó en Boleyn ground, estadio que alojó por 112 años al West Ham United y que pronto será demolido, por lo que los Hammers deberán jugar sus partidos de local en el “Estado Olimpico” de Stratford.
El partido se celebró con una victoria ante el Manchester United, siendo la ultima vez en la que los hinchas del club hicieron su clásica caminata en sus calles icónicas y el último día que el “I’m forever blowing bubbles”, resonó en Upton Park.
Supuestamente esa nueva cancha tendrá más facilidades, entrará más gente, hará que los empresarios dueños del club ganen más dinero… pero… ¿Tan fácil es deshacerse de los 112 años en que los Hammers jugaron allí?
Lamentablemente la identidad del fútbol se esta perdiendo por culpa de empresarios que en este caso no les basta con derribar el estadio emblema, si no que también les dio por cambiar el escudo del club.
Up the Hammers! Farewell Boleyn…