La muerte de Javier Ordóñez, un abogado en Colombia a manos de la policía desató una ola de disturbios en el país sudamericano.
El hecho generó una serie de enfrentamientos entre los manifestantes y la policía y ya se contabilizan 7 muertos.
Durante la tarde, los incidentes se concentraron en los alrededores del Comando de Acción Inmediata (CAI) en el occidente de la capital colombiana al que había sido llevado Ordóñez en la madrugada luego de que dos agentes lo sometieran a varias descargas de electrochoques, como se ve en un video que fue difundido en redes sociales.
La larga noche de enfrentamientos enfrentamientos dejó siete muertos y 248 ciudadanos colombianos heridos, 58 de ellos por arma de fuego, según indicaron las autoridades. La mayoría de los muertos fueron jóvenes que recibieron disparos en la calle.
“Se necesita una reforma estructural de la policía, pero destruir a Bogotá no va a arreglar la policía, no va a restablecer el evidente déficit de confianza y legitimidad que hay en la policía y en los cuerpos de seguridad”, señaló en la madrugada la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, quien le pidió al presidente Iván Duque encabezar la reforma al cuerpo policial.
“Esto requiere compromiso verdadero al más alto nivel”, agregó la edil.
López aseguró que en lo que va del año han recibido 137 denuncias por actuaciones cuestionables de la policía. “Es incomprensible que cuando se le piden cuentas a la policía afirmen que solo conocen de 38 casos”, sostuvo.
Las brutales imágenes del momento en que dos policías sometían al abogado con un arma tipo Taser a pesar de que se encontraba en el suelo y desarmado encendieron el debate sobre el cuestionable actuar de los uniformados.
“Por favor, no más, me ahogo”, señala Ordóñez, quien suplicaba no recibir más descargas del electroshock. El hecho fue grabado por una persona que increpó a los policías por el procedimiento.
Ordóñez fue detenido mientras se encontraba reunido con varios amigos con los cuales estuvo bebiendo alcohol, cuya venta está restringida por las medidas que se adoptaron para enfrentar el coronavirus en Colombia.
El caso de Ordóñez recordó el homicidio de Dilan Cruz, quien fue víctima mortal de un disparo policial en el 2019, que también desató un debate sobre la necesidad de que estos casos no queden en manos de la justicia penal militar del país.
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