Hija de una profesora normalista y un profesor de Educación Física, Carola Canelo es abogada y académica de la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile. Luego de que se viralizara una entrevista que dio a CNN y en la que se lanzó sin rabia pero si con firmeza contra la maquinaria política, decidió comenzar una campaña para la recolección de firmas para postularse como candidata a las elecciones presidenciales de 2017 en un vuelo directo, sin las clásicas escalas por municipios y parlamento.
Sobre por qué optó por este salto directo, por qué ni Jackson, ni Boric, ni Camila Vallejo se salvan de sus críticas al sistema político y cómo planea que su candidatura no sea solamente un proyecto testimonial, conversamos con ella.
“No es aceptable que Jackson, Camila Vallejo y Boric, que llegaron a la cámara con el apoyo estudiantil, no hayan hecho nada concreto para resolver el problema”
Quién es Carola Canelo
¿Cómo nace la idea de ser presidenta?
Surgió después de la entrevista de CNN que se volvió viral. Muchas personas me enviaron correos electrónicos pidiéndome ser candidata, así que parte de la decisión tiene que ver con el apoyo popular. Pero otra es personal, porque tengo la firme convicción de que las dos coaliciones políticas que gobiernan no van a resolver los problemas que hay en Chile. Mi gran motivación es la justicia social. Estoy consciente de los problemas y estoy consciente de cuáles podrían ser buenas soluciones jurídicas por mi profesión, y asumo la responsabilidad.
Se te ha acusado de ser conflictiva por criticar a la clase política, incluyendo a Boric y Jackson, quienes parecen ser una opción joven a la política tradicional
No soy una persona conflictiva, todo lo contrario. Pero hay una cosa ante la que no tengo tolerancia, y es la injusticia. Toda mi vida he luchado contra la injusticia. Cuando veo que hay violaciones a los derechos humanos, como la salud, la seguridad social y la educación voy de frente y controvierto. Pero si ven mi trayectoria, verán que nunca estuve metida en ningún conflicto.
Lo que ocurre realmente en Chile es que las grandes coaliciones tienen productos derivados políticos. En el caso de la UDI o la derecha son Evopoli o Amplitud. En el caso de la Nueva Mayoría es la Izquierda Autónoma, el Movimiento Autonomista y Revolución Democrática. En sus liderazgos son personas apoyadas por la Nueva Mayoría y yo lo lamento por las bases, porque son inocentes. Los jóvenes que se han acercado a estos movimientos han creído genuinamente que estos son partidos nuevos y que son de izquierda. Mi critica a los partidos políticos va porque han violado los derechos humanos y los partidos derivados han sido cómplices de eso. En el caso de la educación superior, han sido cómplices de todas las reformas de la Concertación y la Nueva Mayoría. Eso para mí es algo imperdonable, por eso critico fuertemente a estos jóvenes diputados que se supone tenían que implementar la gratuidad y que sin embargo no han hecho nada concreto. Yo soy rigurosa en eso: o estás con los estudiantes o no estás con los estudiantes.
Jackson ha sido crítico de Bachelet y de cómo resultó ser el proyecto de ley finalmente. Ellos sí estuvieron en la creación pero ahora están en contra de lo que resultó.
Hay personas que me dicen ‘hay que reconocerle que han puesto los temas en la mesa’. Pero no fueron ellos los que pusieron los temas en la mesa. Fueron miles de jóvenes que salieron a marchar y han luchado por la educación gratuita. Cuando se es político hay que realizar cambios concretos en la sociedad, lo demás es testimonial y lo testimonial no es suficiente. Si la sociedad chilena cree que los políticos solo tienen que poner temas en la mesa, entonces el nivel de exigencia al sector político es muy bajo, y por eso tenemos lo que tenemos. No es aceptable que Jackson, Camila Vallejo y Boric, que llegaron a la cámara con el apoyo estudiantil, no hayan hecho nada concreto para resolver el problema. Aquí los discursos no son suficientes. ¿Dónde está el proyecto de ley? Ellos han apostado a la reforma de Bachelet e incidir en el Congreso ¡Pero todos sabemos que el Congreso actual es binominal y que tiene graves problemas de corrupción!
“En Chile nunca ha gobernado una genuina mayoría”
¿Cómo planeas gobernar sin coalición ni apoyos desde la política tradicional?
Hay que cambiar los paradigmas. A las personas en Chile se les ha educado falsamente diciéndoles que solamente pueden gobernar los partidos políticos, y eso es un error absoluto. La dueña de casa, el oficinista, el obrero, el dirigente sindical: todos tienen un dimensión política. Pero ser ciudadano no significa solo votar, sino que también ser candidato. Estas personas del 95% están todas llamadas a participar. En Chile nunca ha gobernado una genuina mayoría. Siempre han gobernado partidos que están absolutamente coaptados por el poder económico. Nosotros vamos a llevar candidatos independientes a diputados y senadores. A todas las disputas políticas vamos a llevar personas de nuestro grupo. Y no nos vamos a dividir. Estamos pensando en principios y no en divisiones. Nos han dividido en clases sociales, en visiones políticas, izquierda derecha o centro, pero no más.
¿Cómo será la elección de la gente que estaría en tu Gobierno?
Por ejemplo, en relaciones exteriores, perfectamente puede ser un funcionario de planta de Cancillería, que tenga los méritos y que previo concurso sea elegido. No vamos a tener la limitación de colocar cierta cantidad de políticos como ha hecho la Nueva Mayoría, que tiene que rellenar con una cantidad de DC, una cantidad de PS, etc. La invitación acá es cambiar el paradigma, un paradigma que nos ha impuesto la clase política y económica dominante, y tenemos todo el derecho de liberarnos. Hay que emanciparse.
¿Crees que será posible superar la candidatura testimonial?
Sí, pero es un desafío enorme. Estoy haciendo esta candidatura independiente para ganar. Nunca he pensado en algo testimonial, porque yo no soy testimonial, yo hago las cosas de forma concreta. Por ejemplo, el 2009 fui contraria al golpe de Estado que hubo acá, que fue el “desembarco” de la Concertación a la Universidad de Chile, porque sabían que perdían el poder con el triunfo de Piñera al año siguiente y habían 3.000 millones de pesos en esta facultad, así que también estaban detrás de la administración de esos dineros. Luché por eso y se logró recuperar la democracia en la facultad. El 2011 me pareció inaceptable que el rector Víctor Pérez Vera no quisiera mostrar los sueldos de los funcionarios y académicos porque habían unas inequidades espantosas basadas en motivos políticos, y demandé al rector. Los partidos políticos y los derivados estaban indignados porque no querían que se mostraran los sueldos con diferencias increíbles: un profesor con una trayectoria de 30 años, titular, ganando $200.000, versus un operador político ganando 14 millones de pesos. La Universidad de Chile hoy muestra los suelos por un juicio que yo patrociné.
[clickToTweet tweet=”Una vez, en 2009, me atacaron con un perro en la sala, porque no querían que yo hablara con mis alumnos.” quote=”Una vez, en 2009, me atacaron con un perro en la sala, porque no querían que yo hablara con mis alumnos.”]¿No tuviste represalias en la Universidad?
El decano Nahum recibió presiones de todos lados, incluido el rector, y tanto de la derecha como de la Nueva Mayoría y los derivados para que me exigieran dejar el caso. Pero yo seguí igual, porque soy de principios. No estoy mirando la conveniencia, no estoy con la calculadora electoral. Por supuesto fue muy desagradable, hubo reuniones a grito pelado para que yo dejara el caso. Pero me mantuve tranquila y seguí adelante. Una vez, en 2009, me atacaron con un perro en la sala, porque no querían que yo hablara con mis alumnos. Estaba haciendo clases y tiraron un perro grande y callejero adentro de la sala para agredirme. Yo descubrí ahí que estaba Sebastian Aylwin, sobrino nieto de Patricio, muy amigo de Gabriel Boric. Ellos me querían amedrentar pero yo seguí adelante.
¿Como supiste que había sido Sebastian Aylwin?
Porque abrí la puerta y vi que estaba ahí. Por la agresión pedí un sumario y el rector no lo quiso hacer contra la Izquierda Autónoma porque estaban todos metidos en el cuento, y fui a la contraloría y el contralor le ordenó al rector hacer el sumario pero nunca lo hizo. No lo hizo porque no quería tener diferencias con Boric y Sebastian Aylwin.
Quiero ser Presidenta de Chile porque quiero enviar el proyecto de Ley de Gratuidad, eliminar el Crédito con Aval del Estado, condonar las deudas que existen actualmente en el sistema de educación superior y aumentar la cobertura de educación pública. Y ese proyecto de Ley solo lo puede hacer el Presidente de la República.
¿Esto también alimentó tu sospechas respecto a estos personajes?
Claro, porque ellos hicieron esa toma con la DC, el PPD y el PS, por lo tanto me di cuenta que eran parte de lo mismo. Por eso para mi es coherente que ellos no hayan luchado por la gratuidad.
Marihuana, aborto, y matrimonio igualitario
¿Estás a favor de la legalización de la marihuana?
Creo que las personas mayores de edad tienen toda libertad para decidir qué consumen, y pienso que la marihuana no debiera estar prohibida. Hay un espacio de libertad individual que no debiera ser perjudicado. Hay personas enfermas que necesitan acceder por razones medicinales a la marihuana, así que soy pro legalización.
[clickToTweet tweet=”Promuevo la igualdad entre hombre y mujer como seres humanos y creo que el aborto debe ser despenalizado.” quote=”Promuevo la igualdad entre hombre y mujer como seres humanos y creo que el aborto debe ser despenalizado.”]¿Y el matrimonio igualitario?
“Estoy a favor del matrimonio igualitario porque hay una igualdad esencial que uno debe respetar a toda costa. El amor es algo propio de todos los seres humanos. En nuestra legislación se establece que toda persona tiene derecho a una familia, y luego dice que el matrimonio es la base de la familia. Por lo tanto, si todo ser humano tiene derecho a tener una familia y el matrimonio es la base de la familia, toda persona tiene derecho a contraer matrimonio, independiente de su orientación sexual. Lo mismo respecto a la adopción. Así como una pareja heterosexual puede, una pareja homosexual también debiera poder. Ser papá o mamá no es solamente procrear. La maternidad y paternidad es crianza y los seres humanos tenemos ese sentido que va a más allá de la orientación sexual, va más allá de la reproducción”.
¿Cuál es tu postura frente a la despenalización del aborto?
“Yo soy feminista. Promuevo la igualdad entre hombre y mujer como seres humanos, y creo que el aborto debe ser despenalizado. El proyecto de ley del gobierno de las Tres Causales me parece de una mediocridad y una falta de respeto absoluta a la mujer. Lo observo desde el punto de vista jurídico, no desde el punto de vista religioso. No es justo. Chile es un Estado laico que debe ser neutral, no debe afectar la religión en las decisiones de política de un país. El código penal chileno sanciona el aborto no como delito contra la vida, como el homicidio, sino que lo sanciona como un delito contra la moralidad pública, porque la legislación contra el aborto en Chile es profundamente machista: está basada en la idea de que la mujer no puede tener una libertad sexual. Hay un machismo y un clasismo muy profundo. Al final terminan siendo las mujeres más pobres las únicas penadas. Tenemos operadores políticos que no solucionan nada y que administran los conflictos y los mantienen de por vida. En Chile se deben elegir personas que tengan una trayectoria de vida que hayan hecho cosas concretas por la sociedad. Basta del discurso, basta lo testimonial, basta de la burocracia política”.
“La dictadura, la Nueva Mayoría y la derecha han hecho un buen trabajo apernando el sistema”
La gran abstención en las últimas elecciones da pie a creer que la gente perdió la fe en la democracia. ¿Qué opinas de eso?
Desde el momento que hay un pesimismo, desde el momento en que hay personas que se denominan apolíticas, quiere decir que la dictadura, la Nueva Mayoría y la derecha ganaron. Han hecho un buen trabajo apernando el sistema, pero la ciudadanía en Chile despertó. Tengo mucha fe en que las personas van a votar y van a participar, y que van a disminuir las posibilidades de abstención. Porque en gran parte la abstención existe porque no hay alternativas, no han habido buenas alternativas. Pero yo voy sin vinculación con partidos políticos que prácticamente han destruido lo que es la sociedad. Nosotros vivimos en una ilusión de consumo, de remuneración y deuda crónica, y eso han generado una sociedad donde las personas sienten una depresión por la corrupción, la falta de cambios y las mentiras. Las personas han tenido fe en los políticos y después los descubren vinculados al financiamiento de pesqueras y cosas irregulares. Eso provoca que la gente no vote, y es a propósito, por eso el voto es voluntario.
¿Qué le dirías a los jóvenes que no votan, que de hacerlo votan por “el mal menor” o que temen votar por candidatos independientes porque creen es “perder el voto”?
Si un joven cree que no se puede cambiar el sistema, está equivocado. Y es grave que en Chile pase eso, por eso esta candidatura independiente y el llamado a participar. Están invitados todos los jóvenes que no militan. No solo que voten, sino que también sean elegidos. Hay que ejercer poder político. Si uno vive en una sociedad en la cual las personas dejan de soñar, de pensar, de sentir, ¿En qué tipo de sociedad vivimos? Es pésimo. Tener miedo de perder el voto es muy malo, porque el miedo es un sentimiento inmovilizador. Que los jóvenes sepan que tienen derecho a elegir y ser elegidos. Se puede disputar el poder político de forma electoral. No bastan las actividades físicas de protesta, no basta la organización social: se requiere disputar el poder político, y disputar el poder político de una manera sustentable en el tiempo. ¿Cómo se disputa el poder político sustentable en el tiempo de manera pacifica, electoral e institucional? Esa es la forma, con personas decentes que no negocian, porque lo que ocurrió con la Concertación fue que negoció con la dictadura.
¿Cómo buscarás llegar a los jóvenes?
La batalla está perdida si la juventud no ejerce su poder político. Si la juventud deja de soñar, si la juventud deja de pensar, si la juventud se deprime, ¿Qué nos queda como sociedad? Está todo perdido sin ellos. Esta es una candidatura para los jóvenes, porque son las futuras y presentes generaciones. Mi motivación de útero, física y emocional, parte con mi contacto por la universidad. No puede haber un cambio social si no hay un cambio interno, y no es aceptable que a los jóvenes se les impida esa cuestión natural de rebeldía, de un sentido revolucionario de buscar cambios sociales profundos. Es la negación de una sociedad. El llamado es a que participen activamente.
¿Por qué no postularse a diputada primero?
Quiero ser Presidenta de Chile porque quiero enviar el proyecto de Ley de Gratuidad, eliminar el Crédito con Aval del Estado, condonar las deudas que existen actualmente en el sistema de educación superior y aumentar la cobertura de educación pública. Y ese proyecto de Ley solo lo puede hacer el Presidente de la República. Por eso no soy candidata a senadora o diputada. No me interesa la burocracia política. Me interesa estar en el cargo que me permita hacer, en términos concretos, estos cambios institucionales que se requieren, por los derechos humanos de los jóvenes y la proyección de la educación. La educación es él instrumento de movilidad social más importante que puede haber, no los bonos Bachelet. Eso es inaceptable. Mercantilizan todo. Hay mucho por hacer y yo quiero concretar. He hecho una lucha completa, no la han querido aceptar. He ido a los tribunales y tampoco han querido. Lo único que me queda es el poder ejecutivo y allá vamos.