Feud es la última creación de Ryan Murphy, donde Jessica Lange con Susan Sarandon cuentan la historia de dos actrices que se odian en un rodaje. Intensidad nivel 10 mil.

feud

Por Fernando Delgado.

Para marzo está agendado el estreno vía FX de ocho episodios de “Feud” la nueva serie producida por el showrunner Ryan Murphy, padre de éxitos como Glee, American Horror Story y American Crime Story. Un hombre de mentalidad profundamente camp, que sabe como escudriñar en los pasadizos más perversos, obscenos y artificiosos de la historia americana reciente, y de la cultura pop universal.

La palabra “Feud” significa una rivalidad extendida por años, también puede ser una enemistad heredada, o dicho más localmente, un odio parido. Y es el título de la nueva serie antológica de Ryan Murphy, evento que enfrenta a Jessica Lange con Susan Sarandon personificando a Joan Crawford y Bette Davis respectivamente durante ese mítico rodaje del cual ambas fueron protagonistas. Un clásico del subgénero psycho-biddy (esas historias de mujeres maduras envueltas en ambientes enfermizos de violencia y secretos turbios) bautizado con el intrigante nombre de “¿Qué pasó con Baby Jane?” o la historia de dos hermanas resquebrajadas por la vanidad, el olvido, la envidia y la demencia. Un material sin dudas doloroso y cruel, que sólo podría haber sido interpretado por dos mujeres con tal carácter y traumas múltiples como Crawford y Davis. La serie cuenta la historia de ese rodaje.

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Si en Nip/Tuck fueron cirujanos plásticos que esculpían en la carne las enfermedades sociales; en Glee adolescentes humillados cantando para no suicidarse por la presión del entorno; en The new normal fue un retrato costumbrista de las nuevas convenciones morales y sexuales; en AHS y ACS, las colecciones en perspectiva de lo siniestro y de la moralidad de EEUU, más The normal heart, una película para televisión donde se narra con una brutal angustia el arrase del sida en la comunidad gay en los albores de 1980. Visto con distancia, la evidencia sobre la mesa es clara: estamos ante un analista de los últimos y más recientes tabúes de Norteamérica.

Por ahora, la instrucción es una sola. Conformarse con la portada de la reciente edición de Entertainment Weekly y con algunos teasers en YouTube, los cuales anticipan los alcances de la trama que advierte cual será el nuevo fetiche televisivo de Murphy; una historia del odio americano. Hoy es un relato centrado en dos divas de carácter de la edad dorada de Hollywood, las mismas responsables de un rodaje infernal para todos sus involucrados a merced de egos monstruosos y de una competencia laboral sangrienta. Batalla liberada desde una sentimiento tan mundano –y nocivo- como la inseguridad, el mismo veneno compartido por dos asustadas enemigas que veían venir una oscura noche saturada de pesadillas alimentadas por el sexismo, la misoginia y la desesperación de asumir el envejecimiento como una condena encadenada al género descubierto al nacer.