Las imágenes son muy fuertes.

Sea Shepherd, organización contra la caza de ballenas, compartió el video de arriba que muestra cómo una flota japonesa mata ballenas el 31 de enero de 2008 en una reserva que se creó para salvar la especie por la Comisión Ballenera Internacional en el óceano Antártico.

El gobierno australiano envió a uno de sus patrullas marítimas para documentar el asesinato en 2008.

“A pesar de una moratoria global sobre la caza comercial de ballenas en 1986, Japón ha estado matando ballenas en el océano Austral en nombre de la “investigación científica” desde 1987″, explicaron desde la organización.

Ese mismo año el Tribunal Federal de Australia dijo que la caza de ballenas en Japón era ilegal.

Australia y Nueva Zelanda llevaron, en 2014, a Japón ante la Corte Internacional de Justicia y demostraron que su programa científico de caza de ballenas en el océano Antártico era ilegal.

“El gobierno japonés continúa enviando su flota ballenera al océano Antártico cada verano austral, con un programa rediseñado y una cuota autoimpuesta para matar 333 ballenas minke protegidas cada año”, dijo Sea Shepherd.

Sea Shepherd logró que el gobierno australiano hiciera públicas las imágenes que documentó el 2008 ya que era un archivo grabado con dinero de los impuestos pagados por los australianos. “El gobierno australiano quería ocultar este metraje para no dañar las relaciones diplomáticas con Japón”, comentan.

Jeff Hansen, es el director de Sea Shepherd en Australia y utiliza estos adjetivos para describir el caso: brutal, cruel, matanza sin sentido.

ELa ballena se sumerge para tratar de regresar a las profundidades, a su familia, pero no puede, ya que los asesinos de ballenas retraen el cable, sacando lentamente a la ballena a la superficie, que se retuerce de dolor antes de que pueda mirar a su asesino; antes de recibir el disparo que finalmente termina con su sufrimiento, aunque muchos minutos después de que la primera gota de su sangre tiña de rojo el mar”, relataron según explica ABC.