Según Estados Unidos, Julian Assange puso “en peligro fuentes de sus servicios de inteligencia”, esto posterior a que su medio Wikileaks publicase 700.000  o más, documentos clasificados sobre actividades militares y diplomáticas estadounidenses, especialmente en Irak y Afganistán. Aunque para bastante gente Assange es algo así como un ídolo/mártir de la libertad de expresión, como Edward Snowden, fue arrestado en abril del 2019, después de pasar siete años refugiado en la embajada ecuatoriana en Londres, hasta que lo echaron porque al parecer, según la info oficial de la embajada, su huésped se portaba pésimo. Pésimo nivel tirar caca a las paredes y jugar fútbol dentro de los salones diplomáticos, etc.

Lo que se supo este fin de semana es que mientras todo esto pasaba, Assange se había enamorado y tenido dos hijos con su abogada Stella Morris. Los niños se llaman Gabriel, de dos años, y Max, de un año. Esta situación se dio a conocer ahora en el contexto de pandemia del coronavirus y está siendo expuesto como una forma de sensibilizar a la opinión pública mientras tanto Morris como Assange piden que se le permita cumplir su condena bajo arresto domiciliario, petición que le ha sido negada por considerarse que si lo dejan salir no comparecería ante la justicia.

Hay que recordar que Estados Unidos busca la extradición del australiano para allá donde podría fácilmente ser condenado a pasar el resto de su vida tras las rejas.