Actividades como conversar con los compañeros o correr por el patio de la escuela son factores clave en el desarrollo físico y social de los jóvenes. Según alertó un grupo de especialistas de la Universidad Autónoma de Chile, estos espacios incluso pueden contribuir a disminuir el bullying y a reducir los índices de obesidad.
Desde conversar con un amigo hasta correr por el patio jugando con los compañeros. El recreo es un momento fundamental en el aprendizaje de los niños y jóvenes que van a la escuela.
Si bien, dentro de las aulas de clases se pueden aprender distintos conocimientos guiados por un profesor, los espacios que se generan fuera del aula también son importantes en el desarrollo físico y en la forma en que aprendemos a relacionarnos socialmente.
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Así lo confirmó un reciente estudio de la Universidad Autónoma de Chile, en el que sus autores destacaron que el recreo ayuda a los niños a aumentar su creatividad, mejorar su razonamiento y progresar en sus habilidades físicas y sociales. Además de mejorar la forma en que se expresan y el manejo de sus emociones.
Uno de los investigadores detrás del análisis, Manuel Almonacid, contó a La Tercera que este progreso en sus habilidades se ve potenciado con el recreo, debido a que “el niño aprende en comunidad”. En este sentido, que tengan estos espacios entre las asignaturas para salir a correr o conversar se vuelve esencial, ya que “la amistad no se genera durante las horas de clase y ese es el impacto”.
Aquello cobra especial relevancia en el caso de los niños que entraron al colegio en medio de la pandemia, debido a que no tuvieron momentos para compartir con sus compañeros en medio de las cuarentenas.
De la misma manera, el investigador enfatizó al citado periódico que los espacios de recreo también contribuyen a disminuir los casos de bullying, debido a que permiten que los jóvenes liberen sus tensiones.
Junto con ello, Almonacid también destacó la importancia de estos momento en el cuerpo: “en un país como el nuestro (Chile), donde hay 90% de sedentarismos y más de 46% de obesidad infantil, es muy importante, necesario e imprescindible que los colegios establezcan un sistema de recreo saludable en el cual el niño pueda tener actividad física y no restringirla a la hora de educación física”.
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