Aunque algunos piensan que quienes se identifican con una orientación sexual en específica se relacionan exclusivamente con personas que se consideren dentro de esa misma orientación, esto no necesariamente es así. Acá te contamos que hay detrás del término “sexoflexibilidad”.
Es común que durante conversaciones familiares o con amistades, e incluso en los medios de comunicación, haya personas que asuman que porque una persona se identifica con una orientación sexual, necesariamente solo puede tener relaciones o pensamientos eróticos asociados exclusivamente a aquella, cuando en la realidad, esto no necesariamente es así y depende de cómo cada persona vive su sexualidad.
Es por esto que los conceptos “sexoflexible” y “heteroflexible” se están posicionando cada vez más para abordar esta temática.
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Según un artículo que el doctor Walter Ghedin escribió para Infobae, el término “heteroflexibildad” hace referencia a quienes tienen contacto amoroso o erótico con personas del mismo género, pero sin que esto influya en la orientación sexual con la que se identifica la persona, en ese caso, la heterosexual.
En palabras del especialista, este concepto de sexoflexibilidad también podría aplicar “para las personas homosexuales que tienen contacto con personas heterosexuales, llamándose en este caso, homoflexibles”.
El deseo, la aventura y la incertidumbre de conocer qué pasará con sensaciones nuevas o desconocidas, son algunos de los elementos que surgen en medio de la flexibilidad en este ámbito.
Y si antes se miraba con cierto rechazo las conductas heteroflexibles, en medio de una sociedad heteropatriarcal que discrimina y ataca fuertemente a las disidencias, hoy en día este concepto al que se refiere Ghedin tiene cada vez más visibilidad en la esfera pública. Aun así, todavía queda mucho camino por recorrer.
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