Cuando afuera hay 32 grados de calor y el cerebro parece agotado y sin chispa, entrar a un cine, con tiernos 12 grados, es la mejor opción. Sobre todo cuando dan una película de esas que uno sabe a lo que va: persecuciones y balazos y peleas y la clásica tiendita de frutas que un auto hace mil pedazos dejando todo desparramado por el piso.
Todo lo anterior está presente desde que parte Skyfall. Ver motos aceleradas como si volaran por los techos de Turquía, piruetas en edificios, peleas en edificios o duelos a muerte en el techo de un tren, hacen que todo sea un verdadero festín cinematográfico.
Es tanto el vértigo, que uno pasa por alto detalles, como de dónde saca tanto poderío logístico el malo de la película.
La trama tiene que ver con la lealtad y el patriotismo. El agente de los servicios británicos Daniel Craig ponen en la balanza la lealtad con su jefa M (Judi Dench) y la lealtad con la nación, tras el ataque terrorista que sufre el MI6, comandado por Raoul Silva (Javier Bardem). Hay que decir que Javier Bardem se luce como malo: el cínico, carismático, calculador, chistoso, hábil y a la larga querible Raoul Silva.
A Daniel Craig, por otro lado, como el 007, da la impresión que no se le mueve un músculo en las mas de 2 horas que dura la película. El “primer Bond rubio” sufre el paso de los años y con harto alcohol en el cuerpo se las arregla para intentar cumplir su misión. Lo mejor de su personaje es que tiene demasiadas cosas en contra, tiene que superar sus propios problemas y sobreponerse a quienes no dan un peso por él.
Dirigida por Sam Mendes (con la premiada American Beauty y la excelente Revolutionary Road) con fama de experto en dirigir dramas, en esta ocasión deja de lado la profundización de personajes o el poder que pueden otorgar buenos diálogos en el desarrollo de la historia, para llevar todo a la acción. Y acción de la vieja escuela.
Gran parte de la crítica ha dicho que esta película seria una especie de versión en clave espionaje del Batman de Cristopher Nolan. Por la estética o por el personaje de Bardem que se asemeja de manera casi calcada a la del guasón, entre otras cosas.
Pero yo soy de la idea que todo es un remix y que mientras funcione, mientras la historia esté bien contada, el resto no tiene ninguna gravedad. Además, llegar a hacer una película buena tiene un nivel de dificultad superior, por muy descarado que sea el homenaje. Skyfall, porque va mas allá en desarrollar los personajes en comparación a otras producciones de la franquicia como a Casino Royale (2006), por ejemplo.
Así las cosas, soy de los que piensan que Skyfall es la mejor de la saga, por lo cuidado de cada escena, por lo vertiginoso de todo, por apostar por un desenlace distinto a lo que se hubiese imaginado cualquiera. Sin tecnología, sin inventos de espionaje ultra modernos, sino que dándole protagonismo a los personajes que tienen mas canas y terminando todo a la antigua, como en los viejos tiempos: ni siquiera utilizando lo letal de una bala.