The Handmaids Tale, obra feminista que supone los futuros peligros para los derechos de las mujeres en una sociedad que teme a su empoderamiento, se convirtió en una exitosa serie de Hulu que nos muestra de forma atroz cómo en un futuro cercano las mujeres serán vistas como elementos netamente necesarios para solo un fin: la procreación.

Este futuro no dista mucho del pasado, e incluso podemos ver casos similares y horribles en países como Afganistán, donde 100 mil mujeres murieron de hambre durante la guerra al no poder salir de sus casas sin la compañía de un hombre (sus maridos se encontraban peleando en el frente).

Durante las grabaciones de la tercera temporada, que se estrenó este mes, cientos de mujeres se reunieron frente al Capitolio en Washington DC y las personas no sabían si se trataba de la filmación o una protesta real. Desde hace dos años, las mujeres se han apropiado de las túnicas rojas para protestar en contra de las nuevas leyes que limitan el acceso al aborto, situación que podemos ver desde Alabama hasta Argentina.

La protagonista de esta serie, Elisabeth Moss, es una de las figuras más sorprendidas frente la particularidad que reflejan estos tiempos donde las mujeres son agredidas y ridiculizadas por exigir igualdad en derechos y el término de los abusos contra ellas.

Cuando veo a las mujeres protestando con el uniforme de criadas siento un orgullo tremendo” aseguró Moss.

“El uniforme habla por sí solo, su significado dice mucho, y aquello es inspirador” agrega.

El primer capítulo de la serie nos muestra cómo la mujeres se manifestaban a favor de sus derechos antes de ser reprimidas. Esto es justamente lo que hace que la popularidad de la serie sea tan alta: lamentablemente, nos muestra un mundo donde las posibilidades y derechos para las mujeres no están garantizados, y muchas veces, son tratadas con labia por otras mujeres con poder, que desacreditan su discurso hacia la libertad.

“El mundo real comienza a parecerse a El Cuento de la criada, ha cambiado desde la forma en que se mueve la información hasta algo mucho más peligroso desde que el show comenzó hace tres años” asegura la actriz que también oficia como productora ejecutiva.

“Espero que la gente se tome esto en serio” agrega Moss. “Espero que no lo tomen como una moda; espero que este sentimiento de indiganción se transforme en algo y tomemos acción contra ello” finaliza.