Mientras más películas se estrenan, más extraño al antiguo Sandler ¿Dónde quedó Little Nicky? o ¿Billy Madison?… dónde sea que estén los extraño!
Siempre me he considerado fan de Adam Sandler, creo que he visto todas sus películas desde “Waterboy”, pero mientras mas películas se estrenan, mas extraño al antiguo Sandler, siempre pienso “Esta si va ser como las de antes”, una que me haga reír como lo hizo “Little Nicky”, “El Aguatero” o“Happy Gilmore”, una como esos clásicos de Sandler, por eso siempre que entro a ver su ultima película voy con la esperanza de que sea así de buena.
Para mi decepción, al terminar de ver las ultimas películas de mi comediante favorito me ha quedado la extraña sensación de que eso no fue una película de Sandler.
Entonces, pasa el tiempo, llega un nuevo estreno, otra vez espero algo que me sorprenda y así llegó “Cuentos que no son cuentos” que, a pesar de no ser una mala películas es… muy familiar, ¡abusivamente familiar!.
Es verdad que Adam siempre ha tenido cierta ternura, quien no ha visto “Big Daddy” sin conmoverse, pero no es eso, lo que molesta en esta película no es el exceso de ternura, si no la falta de ese humor casi negro que Sandler sabe o sabía ocupar tan bien.
Pero bueno, al menos yo le seguiré dando otra oportunidad a Sandler, quizás su próxima película “Funny People” me haga comer todo lo dicho, eso espero o me tendré que hacer fan de Ben Stiller o quizás Jim Carrey. ¡Quién sabe!.
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